De buena ley: el fútbol femenino enfrenta a una pareja

Mujeres y fútbol, ¿son compatibles? ; Que a una mujer le guste el fútbol, ¿condiciona su orientación sexual?
Mariana acusa a su marido de ser, literalmente, un cavernícola. Raúl no consiente que su hija Adela de 16 años juegue al deporte rey en España. Ni tan siquiera consiente que opine de fútbol. Para Raúl, su hija debe hacer lo que hacen las adolescentes: pintarse, comprarse ropa, mirarse cien veces al espejo... no ir de 'mari-macho' dándole patadas al balón y queriendo comentar los partidos con su padre y los amigos.
Mariana exige que su marido pague los 145 euros que cuestan las clases de fútbol a las que quiere acudir su hija. Raúl responde tajante: no! Para Raúl, el que tiene que ir a esas clases es su único hijo varón.
Video del programa completo, muy interesante y aconsejable para aquellos que como yo no lo hayan visto.