De Curra, no tirar ropa y el romanticismo

Las entradas de Curra, de El capricho de marqueza, son imprescindibles en mi ruta de blogs cuando tengo tiempo (cosa que últimamente es un lujo, tengo que organizarme mejor).
Y lo es por dos razones fundamentales:
Porque siempre me deja con la boca abierta con su capacidad para ser chic, admiro muchísimo a la gente que tiene ese don de saber qué ponerse y sobre todo cómo ponérselo! a mi sacándome de los vaqueros y algún vestidin que otro el mundo de las combinaciones me parece más complicado que la teoría de la relatividad
(Menos descojonarte Albert....que la liamos)
Y por las historias que cuenta y que tan bien acompañan a la selección de fotos a cargo de Julián, la otra mitad detrás de la cámara.
La de hoy me ha traido recuerdos. Habla de ese ropa de la que somos capaces de desprendernos para lo que siempre encontramos la excusa perfecta: seguramente se vuelva a poner de moda .Cosa que, desengañate, no pasa never....salvo que tengas un traje o abrigo de un paño excelente que merezca la pena retocar cuando la moda haga un revival. Pero que los diseñadores son muy cucos y siempre le hacen cambios. Que te dicen todos inocentes...ay ay ay que este año vuelven las hombreras...y tú toda emocionada rescatando aquella chaqueta de los 90, con aquel verde precioso y favorecedor que resalta tus ojos y te dices....hala con un pantalón negro voy a ir divina de la life....pues no....NO....acabarás pareciendo a Figo....(foto es mala pero suficientemente descriptiva del "coceto")

Y pensar que a mi este hombre me daba sudores frios...qué bajonazo, qué caida de un mito, qué forma de reinventarse...la verdad.
A mi la naturaleza me ayuda mucho para no ser nostálgica en cuestiones de roperío. Básicamente porque la muy cabrona ha expandido my body y la mayoria de las cosas no acaban de....por decirlo de algún modo....de encontrar acomodo en mi nueva anatomía...vamos, que ni me entran.
A pesar de todo, no he podido resistir la tentación de guardar dos cositas: una torera que estrené con 17 años y que me tenía arrebolada y loca y enamorada y la blazier con la que fui a la primera cita con mi marido...ayyyyyyyyyyyyyy llamadme romántica
Y así termina mi primer jueves reflexivo como los llama Marigem jajaja
Love and kisses,
Fani