Revista Deportes

De títulos morales. los abonados

Publicado el 08 agosto 2015 por Carlos Romero @CarlosRomeroSFC

Al sevillismo le importa un pito estas cosas de los títulos morales. Eso de tener más abonos que el rival nos suena al número de sacos de fertilizantes para el césped del Ramón Sánchez-Pizjuán, en pro de tener una magnífica pradera verde que pisar.

Los únicos títulos son los tangibles, los tocables, los de noble metal, los que se ganan en el campo de juego, y se alzan al son de El Arrebato; esos  que muchos envidian hasta el infinito y más allá, en ese Universo imaginario contenedor de todas las fantasías más rocambolescas habidas y por haber. Lo demás es tontería supina.

Pero no nos gustan las mentiras. Se podría tener más socios puntualmente y demostrarlo con números, pero no se puede decir que el número de socios es bandera y signo de identidad histórica de una afición que en raras ocasiones nos superó.

Las primeras noticias de una afición que hace poco por su equipo no aparecen de lado del Sevilla FC, sino precisamente del otro equipo de la ciudad, cuando el periodista Olmedo dice en Madrid Sport que no se sabe ni media palabra del club verdiblanco y de su afición a finales de 1918. El Betis pasaba una de sus numerosas crisis, que superaban cuando el mecenas de turno aparecía poniendo los jurdeles a conveniencia. Porque aquí hubo siempre dos tipos de clubes, dejemos las cosas claras, el primero en base asamblearia tomando decisiones graves para llevar a su club a buen puerto, y el otro siempre a la espera del mesías salvador que les sacara las castañas del fuego: Sánchez Mejías, el capitán general Sáenz de Buruaga, Benjumea, Mantecón Navasal, Lopera, y tantos otros que llegaron con el dinero – o el influyente poder- por delante.

Y mejor no recordar las palabras del secretario del Betis en 1936 –antes de la guerra, que siempre es bueno recordarlo- que dice que la mitad de los socios sale de espantada, cuando se propone elevar cinco pesetas el abono, porque si no, el Betis se hunde debido a las grandes deudas a los proveedores. Contaba el Betis con 1500 socios y se marcharon 800 dejándolo en la estacada.

El Betis permanecería encallado en Cataluña en ese momento tras hacer una gira, debido a que no puede pagarse el viaje de vuelta, por lo que es el mismo secretario bético nos cuenta cómo será la afición bética la que se movilizaría para traer a sus jugadores a buen puerto, o quizás no:

“La Federación Regional Sur -me interesa hacer resaltar esto- se nos ofreció, haciéndonos un anticipo de 1.000 pesetas suficientes, ahora, para el regreso de los "equipiers". Era las que necesitábamos, de momento. También nos han hecho ofrecimientos buen número de deportistas, incluso significados sevillistas, cosa que agradecemos en todo su valer ...”

Don Alfonso Jaramillo, que en paz descanse, que vivió muy de cerca y durante muchos años su Real Betis Balompié, declaró firmemente en diversas ocasiones, que el Betis no contaba con más de 100 socios cuando su club penaba en Tercera División. Durante esos años, fieles a la tradición militar que el Betis profesó hasta finales de los años 70, los soldados que hacían el servicio militar en Sevilla, podían percibir una entrada para ver el fútbol en el estadio municipal de Heliópolis, viéndose teñida la grada del tradicional color caqui, para que al menos se viese algo de público.

Podríamos decir que el Betis fue un club con suerte, siempre aparecía vivito y coleando tras sus numerosas crisis, y no parece por tanto que su afición fuese precisamente la abanderada de este club a la vista de los hechos.

En contrapartida el Sevilla FC siempre fue un equipo mejor que el bético históricamente, las 18 copas de Andalucía frente a solo una del equipo verdiblanco lo avalan, así como la clasificación histórica, que es como la prueba del algodón, es decir, no engaña. Ello lógicamente posibilita que el estadio sevillista habitualmente aparezca lleno y con muchos socios, debiendo el Sevilla FC plantearse el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán con más capacidad que el de Nervión, sencillamente porque sus 22.000 plazas eran a todas luces insuficientes.

No tenemos desgraciadamente cifras de la contabilización de socios hasta finales de los años 70, pero los indicios y pruebas apuntan a que siempre fue el Sevilla FC quien tuvo tradicionalmente mayor número de socios.  Y es desde ahí cuando vemos y comprobamos que en una década como la de los años 80, el mayor número de socios que alcanza el Betis es de 21.000, mientras que el menor número en el Sevilla FC fue de 31.000, es decir, entre el mayor y el menor había una diferencia de 10.000 abonados, y las referencias hablan de cifras record históricas en el Betis y como algo excepcional, cosa que no ocurría con el Sevilla FC.

Fue quizás en los años 90, con Don Manuel Ruiz de Lopera y Ávalos, cuando el Betis supera en algún momento puntual las cifras de abonados del Sevilla FC, con el Betis de donmanué en el mejor momento de sus historia. aunque no quieran ahora reconocerlo.

En la década de los 2000/2010 solo nos superaron puntualmente un año al principio de la década, pero cuando coincidimos en Segunda División el Sevilla FC tuvo más abonados que el Betis, por lo tanto tampoco en esa ocasión hicieron gala de la leyenda urbana.

El caso es que estas cosas de que es mejor afición que la sevillista aparece cuando el Sevilla FC comienza a reinar en Europa y adquiere otros tantos títulos nacionales, en el que parece que necesitan destacar en algo sobre el Sevilla FC, pero como podemos comprobar no deja de ser pura propaganda, el ramalazo de manu militari les viene de lejos, y la afición en Sevilla siempre fue blanquirroja, se pongan como se pongan.

Si quieren, pueden ver algunos datos históricos oficiales en cuanto a asistencia aquí.

Que no nos mientan más.

.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas