Del dicho al hecho…

Una nueva forma de hacer política es la consigna vendida por Podemos para captar el voto de la gente hastiada del auténtico abuso que llevaron a cabo nuestros próceres hasta ahora, tanto legalmente (prebendas y privilegios) como delinquiendo (corruptos), y nos ofrecieron una forma distinta de gestionar la vida pública, alejada de lo que dieron en llamar “casta”, supone uno, que para diferenciarse en su comportamiento de lo que estábamos habituados a ver hasta ahora. El Sr. Zapata, flamante concejal de Podemos en la capital del reino, inició su andadura como edil madrileño metiendo a varios judíos en el cenicero de un “seiscientos”, o haciendo gracias poco o nada graciosas, sobre la amputación de Irene Villa; ahora, en vez de renunciar al privilegio del coche oficial, lo recoge diariamente en Malasaña, para lo que comete con la misma frecuencia la infracción que evidencian las imágenes adjuntas.

¿Donde está el nuevo modo de hacer política?. Es bastante sencillo; la honradez bien entendida, empieza por uno mismo, y resulta indudable que hemos sustituido los jinetes, pero siguen montando los mismos caballos mientras la ciudadanía no tiene otro remedio que andar a pie. Las siglas, las ideas, los programas, poco o nada tienen que ver con la realidad cotidiana que sigue demostrando la amplia sima que separa a los dirigentes del pueblo llano, hasta de los más progesistas, comprometidos y solidarios (menos con los judíos, claro), como el Sr. Zapata.