Revista Música

Depeche mode – capítulo 1 (del tecno a la música industrial)

Publicado el 29 mayo 2017 por Perendengon

Hola Graminoleños.

Echando la vista atrás musicalmente hablando es uno consciente de lo rápido que pasa el tiempo. Todavía recuerdo la cantidad de veces que habré bailado y vibrado con la música de los protagonistas de los tres próximos artículos de “La Graminola” y ya han pasado casi 40 años desde su debut. Pero lo mejor de todo es que después de todo ese tiempo todavía continúan dejándonos buena música. Estoy hablando de los inigualables Depeche Mode”.

Vaya por delante que este artículo y los dos siguientes van dedicados a mi querido amigo Castilla, un “depechemodólogo” auténtico que a buen seguro vibrará como siempre con su música. Va por ti, amigo. Y espero con ansias tu opinión al respecto. Un abrazo.

Siempre se ha buscado colocar la vitola de “máximo exponente del tecnopop de los 80” a distintos grupos y artistas, pero en el caso de Depeche Mode podríamos considerarles como los auténticos padres del denominado “rock electrónico”, estando considerados como una de las más grandes bandas del pop de todos los tiempos y auténticos precursores y dominadores del uso de sintetizadores. Con esto queda todo dicho.

Su creación data del año 1980 pero con anterioridad a ese momento, sus cuatro miembros ya habían hecho sus pinitos musicalmente hablando. Os pongo en antecedentes.

Es curioso que el gran responsable de la fundación del grupo fuese precisamente quien menos tiempo permanecería en el mismo, pero sin la figura de Vince Clarke no es posible entender lo que vendría después. Él junto a su gran amigo Andrew Fletcher crearon un dúo llamado No Romance In China cuando apenas tenían 16 años aunque no tendría demasiado recorrido. Posteriormente, Clarke formaría otros dos grupos:  The Plan y French Look, este último con la presencia ya de Martin Gore, en ese momento la tercera pata del banco.

Poco tiempo después, Fletcher se uniría a Clarke y Gore para formar un trio denominado Composition of Sound, grupo que puede considerarse como la auténtica semilla de Depeche Mode aunque en aquel momento la música que hacían estaba bastante alejada de la que les llevaría al éxito, con un sonido en el que las guitarras eran las que mandaban.

Habida cuenta de que no progresaban como ellos pretendían, Clarke le daría un vuelco al sonido del grupo adentrándose en el mundo de los sintetizadores y reclutando para la causa a David Gaham como vocalista el cual sugeriría el cambio de nombre de la banda. Corría el año 1980 y había nacido Depeche Mode.

Una vez tomado cuerpo el proyecto juntos, grabarían su primer sencillo en un sello independiente de poca importancia que sería incorporado a un recopilatorio de bandas emergentes titulado “Photographic”. Su trascendencia sería menor pero servirían para ponerles en circulación y que fuesen conocidos para un público más amplio.

Como tantos y tantos grupos, poco a poco se irían abriendo camino a base de tocar en garitos de aforo reducido hasta que llamaron la atención de un representante de una de las discográficas que en su momento les había rechazado. De esta manera se les abrirían las puertas para publicar su primer álbum, pero como paso previo aparecería un nuevo sencillo en el mercado.

Su carta de presentación sería “Dreaming On Me” una canción que llevaría implícito el sonido que iba a marcar su carrera. Los sintetizadores llevaban el mayor peso de la parte instrumental y la voz de Gaham lograba la combinación perfecta. Con esta canción no entrarían en los puestos de privilegio de las listas de éxito pero el público británico sí que quedaría satisfecho con su sonido haciendo que su popularidad empezara a subir considerablemente.

Tras ponerse “en circulación” llegaría la publicación de un nuevo sencillo que iba a convertirse en el primer gran éxito de su carrera y que iba a darles a conocer internacionalmente. Se trata de “New Life”, uno de los auténticos himnos del tecnopop de los 80.

Con esta canción entrarían en los primeros puestos de las listas de éxitos por lo que la publicación de su primer larga duración sería inminente. De esta manera, entrarían en el estudio de grabación con el objeto de dar cuerpo a las canciones que iban a componer su álbum de debut.

De esta manera, a finales de 1981 saldría al mercado el esperado disco, bajo el título de “Speak & Spell”, título escogido por Clarke, tomándolo de un juego infantil de deletreo que por aquel entonces causaba furor en los tiernos infantes británicos.

DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

El disco está marcado por el sonido de sintetizadores y está considerado como uno de los álbumes más emblemáticos del tecno de los 80. La mano de Vince Clarke lo llena todo ya que él es el compositor de todos los temas menos uno y muestra claramente su virtuosismo con los teclados lo que le valdría el reconocimiento de crítica y público.

Al mismo tiempo que se publicaba el álbum, aparecería en el mercado un nuevo sencillo que iba a convertirse en un éxito total en toda Europa. Otra de las míticas canciones de la década de los 80, con un ritmo frenético y los teclados de Clarke llenándolo todo. Me estoy refiriendo a “Just Can’t Get Enough”.

Todo marchaba viento en popa, aunque las primeras diferencias entre los miembros del grupo empezarían a aparecer. Clarke quería controlarlo todo pero sus compañeros de viaje no compartían esta idea. Además, las letras de sus canciones eran bastante sencillas y sus melodías concebidas casi en exclusividad para bailar, mientras que Martin Gore quería darle al grupo un aire un tanto más serio. Desde este instante los enfrentamientos entre ambos serían constantes.

Que las composiciones de Clarke estaban concebidas principalmente para bailar se nota simplemente con ir escuchando las canciones que integran el disco, pero hay una de ellas en la que el propio compositor admitiría que la había creado para que sonara en las discotecas. Me estoy refiriendo a “Nodisco”.

Las críticas hacia el disco fueron bastante dispares. Algunas fueron muy favorables destacando el virtuosismo de Clarke con los teclados y los ritmos pegadizos de sus canciones, pero otras no lo fueron tanto, incidiendo en la simplicidad de su música y en la poca profundidad de sus letras. Fuera como fuese, lo cierto es que las ventas del disco fueron considerables y el público en general aceptaría con mucho agrado la irrupción de Depeche Mode en el panorama musical de aquella época.

He de reconoceros que a mí este disco me encanta. Recuerdo que cuando lo compré lo hice un poco sin saber lo que me iba a encontrar dentro ya que únicamente conocía un par de canciones, pero desde el momento en que lo tuve en mis manos rara era la tarde en la que no sonaba en mi tocadiscos.

Y sí tengo que quedarme con una de las canciones he de reconocer que “What’s Your Name” es mi auténtica debilidad.

A pesar del éxito, las diferencias entre Clarke y el resto del grupo fueron creciendo y la gota que colmaría el vaso sería el rechazo a una canción del teclista por parte de sus compañeros, lo que originaría que la andadura de Vince Clarke en Depeche Mode, llegara a su fin. Resulta bastante curioso que el auténtico fundador del grupo y en un principio líder del mismo, así como compositor de la casi totalidad de sus canciones abandonara el barco justo cuando empezaba a cobrar gran protagonismo, pero lo cierto es que el bueno de Clarke siempre ha sido culo de mal asiento como ya os conté en su día en el correspondiente artículo de “La Graminola” dedicado a su persona. (Ver “La Graminola de 26 de febrero de 2017)

Por cierto, la canción rechazada en cuestión sería “Only You” un tema que Clarke convertiría en un exitazo a nivel mundial con su siguiente proyecto, Yazoo, junto a la gran Alison Moyet. Desconozco si los chicos de Depeche Mode se arrepentirían en algún momento de haberla rechazado.

Muchos pensaron que la marcha de Clarke iba a significar el fin del grupo, pero muy pronto iban a darse cuenta de que estaban equivocados. A partir de ese momento sería Martin Gore el que asumiría el mayor peso a la hora de componer, dejando muestras de inmediato de su talento.

Pero el primer paso a dar era el de encontrar un nuevo teclista, por lo que colocaron un anuncio en una revista poniendo como único requisito que el interesado no contara con más de 21 años de edad. El elegido finalmente sería Alan Wilder, que mentiría en cuanto a su edad para poder ingresar en la banda, aunque su ingreso no sería definitivo ya que en un principio lo haría como miembro de apoyo en la gira que estaban preparando.

A principios del año 1982 aparecería en el mercado un nuevo sencillo, titulado “See You”, que era el primer tema compuesto por Gore y que iba a convertirse de inmediato en su mayor éxito hasta ese momento, batiendo en cuanto a ventas los números de anteriores sencillos. El trauma que parecía podía provocar la salida de Clarke había sido superado sin mayores problemas.

Ese mismo año publicarían su segundo disco, primero tras la marcha de Clarke, que llevaría el título de “A Broken Fame” y en el que se notarían claramente los cambios en cuanto a composición y, sobre todo, a las letras, algo más personales y menos vitalistas, de la mano de Gore que poco a poco se iba convirtiendo en el líder de la banda, de momento.

DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

Este primer disco con la nueva formación siempre ha sido considerado como una especie de transición con respecto al primer trabajo con Clarke a la cabeza, por lo que no estuvo exento de algún que otro sobresalto. Alan Wilder, que seguía sin ser considerado miembro del grupo, quería tener más presencia e incluso realizar labores de composición, pero sus compañeros se mantuvieron firmes en su decisión … de momento.

Este trabajo está considerado, incluso por ellos mismos, como su peor disco. Y es que la obsesión por romper con su primera etapa y reinventarse les llevaría a precipitarse un poco. Además, alguno de los temas que lo integran siguen teniendo el ramalazo “Clarkiano”, siendo el caso más evidente otra de las canciones destacadas de este trabajo: “The Meaning Of Love”.

Como contraste existen otras canciones que se alejan totalmente de la línea de su álbum de debut, objetivo real que perseguían con este segundo trabajo, siendo “Leave In Silence” la más representativa de la evolución que irían mostrando a partir de este instante, aunque todavía se parecía mucho a lo hecho hasta ahora.

Se trata de una composición en la que Gore se emplea de manera tranquila y con una letra que según dicen las malas lenguas está dedicada a la marcha de Clarke del grupo. Ellos nunca han confirmado ni desmentido este extremo así que …

Alan Wilder seguía sin ser considerado miembro del grupo, a pesar de que su involucración era cada vez mayor. Esta resistencia por parte de sus compañeros radicaba en que como Clarke había sido el teclista del grupo hasta su llegada y lo que querían era romper totalmente con esa etapa, se mostraban reacios a que otro teclista formara parte efectiva de la banda.

Como rectificar es de sabios, y habida cuenta de que el virtuosismo de Wilder en sus actuaciones en directo aportaba mucho, llegaría el momento de cambiar de opinión y pasar a ser considerado como el cuarto miembro de Depeche Mode.

De esta manera, en el año 1983 aparecería en el mercado un sencillo, titulado “Get The Balance Right” que se convertiría en el primero en el que recuperarían el formato de cuarteto con Wilder ya como miembro de pleno derecho de la banda.

Ese mismo 1983 puede considerarse como el año más importante dentro de la carrera de Depeche Mode ya que se producirían múltiples cambios que darían cuerpo definitivo a lo que el grupo iba a ser a partir de ese momento. La inclusión definitiva de Wilder como cuarto miembro de la manda sería la más importante, pero no la única variante.

La figura de Wilder sería fundamental en este momento porque su manera de tocar los teclados marcaría la tendencia que el grupo llevaría a partir de ese momento con la inclusión de samplers y sonidos de maquinarias, automóviles y similares, iniciando de esta forma lo que se dio en llamar “la época industrial de Depeche Mode”.

Además, Wilder empezaría a tomar protagonismo a la hora de componer algunas canciones, como veremos a continuación, pero posiblemente el cambio más importante vendría de la mano de las labores de producción. Sus dos primeros discos fueron producidos por ellos mismos, algo que cambiaría en los dos siguientes trabajos, recayendo dicha labor en la persona de Gareth Jones del que puede decirse que se convertiría en el verdadero artífice de lo que el grupo iba a convertirse para el mundo del pop en un futuro no muy lejano.

Así las cosas, a finales del año 1983 aparecería en el mercado su tercer disco, titulado “Construction Time Again”, un trabajo creado de manera conceptual, marcado por ese sonido industrial y que puede considerarse como el primer disco real del grupo, dado que ellos mismos consideraban su disco de debut como un disco más de Vince Clarke que del grupo en sí y el segundo un álbum de transición hacia lo que realmente querían ser.

DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

Este giro hacia esos efectos sonoros resulta evidente en el primer sencillo que aparecería de este trabajo. Se trata de una canción que con el tiempo se ha convertido en un auténtico clásico y uno de sus mayores éxitos en Europa. Me estoy refiriendo a “Everything Counts”, un tema cuyo inicio a base de un sampler inconfundible merece la pena ser escuchado una y otra vez.

Tanto la crítica especializada como el público en general acogerían de buen grado este nuevo estilo, recibiendo el disco grandes elogios y siendo considerada “Everything Counts” como una de las mejores creaciones de toda su carrera. Además, su letra no es otra cosa que una crítica feroz hacia su anterior casa discográfica (la eterna cantinela de siempre), marcando tendencia a partir de entonces el que sus letras fueran menos festivas y más involucradas.

Su éxito en Europa empezaba a ser importante, pero en Estados Unidos todavía no habían calado demasiado hondo, por lo que la gira correspondiente a este disco solamente abarcaría al Viejo Continente, consiguiendo un mayor éxito que con las dos anteriores. Poco a poco iban cumpliendo expectativas.

Lo cierto es que el único tema que obtendría grandes resultados sería “Everything Counts”, toda vez que el segundo y último sencillo del álbum, “Love In Itself” cosecharía un éxito menor. De cualquier modo, la gira fue todo un éxito y en muy poco tiempo iban a comprobar como las puertas del mercado norteamericano se les iban a abrir de par en par.

Como ya os comentaba, las labores de composición seguían recayendo mayoritariamente sobre las espaldas de Martin Gore, pero Alan Wilder por fin se había salido con la suya y conseguiría que sus compañeros le permitieran componer un par de canciones de este disco.

Curiosamente, las dos aportaciones de Wilder al disco son las que menos sonido industrial muestran y se acercan bastante más a la música hecha hasta este instante. El sonido del sintetizador se asemeja al de su álbum de debut, aunque con distintas técnicas. A mí personalmente el tema “Two Minute Warning” me parece bastante bueno.

Pero la figura de Wilder no era la única que iba a crecer a partir de este instante. Estaba claro que después de la salida de Clarke, Gore se había convertido en el que marcaba del algún modo el camino a seguir pero poco a poco David Gaham iba a ir ganando terreno en cuanto a protagonismo para convertirse en la imagen y líder de la banda.

La manera de cantar de Gaham, cansada, acompasada y en ocasiones angustiosa y deprimida no pasaría desapercibida y su personalidad empezaría a crecer y a crecer. Lo mejor de todo es que esa manera de interpretar empezaría a calar en el público norteamericano, algo que resultaría evidente ya en el año 1984.

En ese momento publicarían un sencillo que iba a convertirse en el espaldarazo definitivo en Europa y, sobre todo, el primer gran éxito en tierras norteamericanas, donde se encaramó en los primeros puestos de las listas de aquel país. Me estoy refiriendo a “People Are People”, su primer gran éxito a nivel mundial.

Bajo unas líneas muy similares a las de este disco, en el año 1984 llegaría su cuarto trabajo, bajo el título de “Some Great Reward”, significando su despegue definitivo al otro lado del charco, empezando a conquistar también el mercado americano.

DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

Nos encontramos con un disco continuista con el tono industrial de su anterior trabajo pero con algunas variantes. En esta ocasión las labores vocalistas de Gore se hacen más evidentes alternándose con Gaham a la hora de interpretar las canciones. Que lo componen.

Pero lo más significativo de este disco estriba en las letras de sus canciones. Temas sociales, sexuales o religiosos son tratados sin ningún tipo de tapujos, por lo que en algunas emisoras de radio serían censuradas, considerándose éste el trabajo más polémico de su carrera. Una vez más, el falso puritanismo de algunos intentó dar clases a quien no las necesitaba.

De hecho, en “People Are People”, incluida en el disco, trataron el tema del racismo, pero sería con “Master And Servant”, una canción de un pronunciado contenido sexual, con la que más revuelo levantarían y, como suele suceder en estos casos, con el que más ventas y más éxito cosecharían. Cuantas y cuantas veces la censura ha conseguido justamente el efecto contrario que perseguía … y volvían a caer.

Aunque parezca mentira, todavía había otra canción que escandalizaría todavía más al personal. En esta ocasión abordarían el tema religioso y eso por aquella época no estaba bien visto ni por estas tierras ni por el Nuevo Continente, por lo que la censura volvería a hacer de las suyas, inútilmente una vez más.

Se trata de “Blasphemous Rumours”, una canción que tuvo muchos problemas para poder ser escuchada a través de las emisoras de radio del Reino Unido y que hablaba del extraño sentido del humor que tiene Dios. Como siempre os digo en estos casos no es para tanto y lo importante es deleitarse con la música.

Aunque las líneas de este cuarto trabajo son muy similares a las del anterior, en él se incluyen algunas pequeñas variaciones. Una de ellas es el mayor protagonismo a la hora de cantar por parte de Gore, aunque el peso sigue recayendo en las espaldas de Gaham que seguía creciendo y creciendo en popularidad.

Además, sería la primera vez en la que se incluiría una balada entre las canciones que lo integran. Hasta ese instante, sus melodías siempre habían sido con un ritmo bastante marcado, muchas de hechas concebidas para bailar, habiendo realizado algún escarceo con medios tiempos pero más “rápidos” de lo habitual. Esta tendencia baladista empezaría a hacerse habitual a partir de ese instante.

En “Somebody” se juntan ambas características, ya que se trata de un tema compuesto e interpretado por Gore, convirtiéndose en la primera gran balada de su carrera. Por supuesto que después vendrían unas cuantas más.

Tras una agotadora gira decidirían tomarse un pequeño descanso, momento en el cual publicarían un recopilatorio con los éxitos de sus cuatro primeros discos y un par de nuevas canciones. A decir verdad serían dos los discos publicados, ambos en el año 1985, ya que su título y su portada cambiaría según se publicara en Europa o en Estados Unidos, aunque su contenido era idéntico.

En Estados Unidos, el recopilatorio llevaría el título de “Catching Up With Depeche Mode”.

DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

Por otra parte, en el Reino Unido y resto de Europa, el disco llevaría el título de “The Singles 81-85”.

DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

Por supuesto que no faltarían en estos recopilatorios algún tema inédito. Concretamente serían dos las canciones nuevas incluidas en el disco. La primera de ellas, de título “Shake the Disease” nos deja el sonido industrial de los últimos tiempos pero con una melodía que en cierto modo nos recuerda a sus dos primeros discos.

El otro tema inédito fue “It’s Called a Heart”, con las mismas características del anterior aunque para mi gusto un poco más flojo. Vamos, una canción de relleno que podría haberse evitado perfectamente.

El hecho de tomarse un año sabático desataría todo tipo de rumores. Hacía tiempo que se comentaba que la rivalidad existente entre Gaham y Gore por convertirse en el líder indiscutible del grupo era muy grande. De ahí a lanzar el bulo de una posible separación había un camino muy corto. Lo cierto es que los que así se manifestaban estaban muy equivocados ya que la salud del grupo era excelente.

Así pues no quedaba más que esperar la publicación de su siguiente disco y comprobar qué camino en cuanto estilo sería el elegido. El pequeño oscurecimiento de su sonido y las letras de sus últimas composiciones estaban poniéndoles la vitola de una tendencia gótica, que si bien tenía ciertos puntos en común, no era lo que ellos pretendían.

Pero esta es otra historia que conoceremos en unos días en el siguiente artículo de “La Graminola”. Así que si queréis seguir disfrutando de la buena música de Depeche Mode no podéis faltar.

Hasta la próxima, Graminoleños.

JUAN JOSÉ GOMARIZ


DEPECHE MODE – CAPÍTULO 1 (DEL TECNO A LA MÚSICA INDUSTRIAL)

Volver a la Portada de Logo Paperblog