Revista En Femenino

Divina paciencia

Publicado el 13 marzo 2013 por Bebloggera @bebloggera
Por Ajonjolí desde Chile
Paciencia. Esta palabra me produce escalofríos. Es como si a súperman le dijeran Kriptonita… así de tétrico. Es mi peor pesadilla porque definitivamente carezco de ella. Y después de los capítulos de Break Up me decidí a mejorar como persona, así que, ¡manos a la obra!
DIVINA PACIENCIA

Me puse jardinera y con pala en mano comencé a cultivarla. Lo primero que hice fue sembrar la semilla de lo que significa tener realmente paciencia y me esforcé leyendo ensayos y artículos que hablaban de esta tan preciada arma. Porque seamos honestas, tener paciencia es una cualidad que puede traer muchos frutos positivos.
Lo divertido es que mientras más leía sobre ella más ganas me daban de tenerla y así… comencé a perderla. ¡Craso error! ¡Primera tarea no cumplida! Esta fue una muestra clara de que busco placer de forma inmediatasin comprender que muchas veces la espera permite saborear de otra forma ese placer.

Quiero compartir con ustedes los apuntes que pude obtener de este mini estudio. A mí me sirvió para comprender muchas cosas y también descubrir que sufro una enfermedad crónica: IMPACIENCIA.
La impaciencia es un sentimiento de urgencia compulsiva que impide que seas constante en cualquier situación o actividad por lo que se tiende a tomar muchos caminos para conseguir el objetivo de forma inmediata, lo malo es que nunca se llega a término de ninguno de esos caminos.
Según el blogpsicológicamente.blogspot.com, para combatir la impaciencia conviene ejercitarse en:
  • Entendimiento correcto: Apreciar las cosas tal como son, para lograr tener una visión clara de lo que ocurre.
  • La Meditación: Esta práctica nos ayuda a aprender a esperar.
  • La misma paciencia.
  • La ecuanimidad: firmeza de mente para mantenernos equilibrados.

DIVINA PACIENCIA

Ya saben ya, deben cultivar paciencia


Cuando nos dejamos caer en la impaciencia nos mantenemos siempre en la duda y la vacilación. No llegamos a madurar ninguna de las actividades ni relaciones humanas en las que nos vemos involucrados. ¿Cómo podemos darnos cuenta de que quizás nuestra paciencia necesite reforzarse? Cuando comenzamos alguna actividad con un falso entusiasmo que declina con el pasar de las horas, días o semanas, para llegar al desánimo.
Mis queridas, no es fácil pero nunca imposible. Aprendamos a trabajar la paciencia. Podemos realizar incluso ejercicios que van desde comer una manzana hasta algo más elaborado como lo que nos presenta es.wikihow.com:Tomamos una cartulina de 20.3 x 27.9 cm. y le cortamos un agujero de 2.5 cm. de diámetro. Nos sentamos en un lugar cómodamente y con nuestro dedo índice y el pulgar sujetamos la cartulina extendiendo el brazo para que se aleje de nuestro cuerpo. Miraremos por el agujero concentrando nuestro campo de visión hasta que la cartulina se haga invisible. No la percibamos. Puedes comenzar con 20 segundos y cuando te sientas preparado aumentas el tiempo.
¡Espero que a las impacientes este artículo les sea de gran ayuda!
Besitos.

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