El procedimiento es muy sencillo ya que tan solo nos hace falta un tablón de madera (de venta en tiendas de bricolaje) y unos Caballetes VIKA Lerberg de Ikea, que cortaremos a la altura deseada.
La mezcla de blanco y madera es un acierto seguro, su sencillez consigue piezas atemporales y fáciles de adaptar a cualquier estilo decorativo.
El presupuesto es fácil que no sobrepase los 20 euros y si quieres conseguir un efecto todavía mejor, puedes optar por un tablero de madera maciza, pintarlo o hacerle alguna patina para un efecto mas personal y duradero.
Ikea es una caja de sorpresas y la creatividad de la gente aún mas, una mesa diferente, con estilo, práctica y funcional... ¿no os parece? Bss, Ine
Vía: weekdaycarnival
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