Revista Diario

Dormir con los hijos. ¿Por qué colechan las familias?.

Por Gracitata @Lactandoamando
Colechar (dormir en la misma cama) o dormir en la misma habitación que los padres, un tema del que se habla mucho últimamente en diferentes medios.
Dormir con los hijos. ¿Por qué colechan las familias?.
Ya hemos hablado muchas veces sobre los beneficios del colecho, tanto para padres como para los más pequeños. Existen muchos estudios al respecto y aunque en nuestro  país aún es un tema que provoca mucha controversia y discusiones entre familias, es un hecho que cada vez más personas se apuntan a tener cerca a sus hijos durante la noche.
Para los bebés amamantados y las madres lactantes es muy útil, ya que ni madre ni bebé tienen que moverse para dar el pecho ni para mamar, es más permanecen casi dormidos en muchas ocasiones.
Para los padres es una fuente de tranquilidad y de descanso. Puedes vigilarlos de cerca y además descansan mejor que teniendo que dar viajes a media noche a otra habitación.
Los bebés y niños descansan mejor también, no deben estar pendientes de si están solos y en peligro, lloran menos y están menos nerviosos, así que, normalmente, duermen bastante más y mejor.
Como veis, son muchos los beneficios por los que se “justifica” el colecho el dormir en la misma habitación con nuestros hijos, pero, ¿por qué colechan realmente las familias?, ¿solo persiguen los citados beneficios?, ¿sólo buscan descansar mejor?, ¿o hay algo más allá de todo esto?
En nuestra página en Facebook planteamos esta pregunta a todos nuestros seguidores, les preguntamos los motivos por los que ellos colechan o duermen cerca de sus hijos y esto fue lo que nos respondieron algunos de ellos al respecto:
“Simple y llanamente porque a los tres nos gusta y estamos a gusto haciéndolo así....
Yo no sé si será mejor o peor.... Sólo sé que nos hace felices a todos dormir juntos. Me encanta el momento de antes de dormirnos, mientras nos abrazamos y besamos los tres mutuamente. Me encanta despertar por la mañana y ver a mi familia a mi lado. Yo ya no concibo dormir de otra manera.”

•“Con la primera niña convencimiento de que era lo mejor y lo que quería hacer. Con la segunda además, comodidad.”

•“Porque nos gusta. Aunque ella casi ya no quiere y suele irse a su cama.”

•“Yo iba a colechar durante 3 meses como mucho, y mira tú, jeje. Empezamos por comodidad, por puro instinto de supervivencia, porque los madrugones después de una noche sin dormir pesan menos si por lo menos evitas los paseos de una habitación a otra.
Sin embargo, no tardé mucho en aprender a disfrutar de ese momento mágico de amor compartido, a apreciar todos los detalles: su plácida respiración, el maravilloso olor de su pelo, mezcla de champú y sudor, esa sensación de plenitud, de sentirme en paz con el mundo.
Hasta las patadas en las costillas y los "robos" de manta empezaron a tener su encanto, porque eran nuestros, un aspecto más de nuestra rutina, una de las muchas manifestaciones de nuestro amor.
Mi hijo durmió en nuestra cama durante 4.5 años, se "independizó" al convertirse en hermano mayor, porque la peque no le dejaba dormir. Cuando se fue a su habitación, empezaron los desvelos nocturnos y los paseos hasta su cuarto solo para comprobar que dormía bien, que seguía tapado y no tenía pesadillas.
Mi hija tiene 3.8 años y sigue durmiendo conmigo. Ella misma decidirá cuándo dejar de hacerlo. Cuando llegue ese día, multiplicaré los paseos por  dos y me reafirmaré en que la angustia de separación no la tienen solo los bebés.
No sé cuándo llegará ese momento, pero no tengo prisa. Cuando ocurra, sentiré esa acostumbrada mezcla de orgullo y nostalgia, una etapa superada que ya no volverá.
Creo que no está mal para 3 meses”

•“ Porque él se siente bien, protegido ,tiene 4 años y medio y desde los 2 que se vino a nuestro cuarto, él solito De bebito dormía con nosotros pero como al año y medio lo pasábamos a su cuarto, duró poco, porque siento que él se siente feliz y necesita protección”

•“Mi hija dejó de dormir sola cuando le quitamos el chupete con 18 meses para que no pasara tanto apuro, y para no tener que levantarnos, básicamente.
Al nacer mi segunda hija, juntamos una cama de 1'35 a la de 1'50, y desde entonces no concibo dormir de otra forma. Me arrepiento muchísimo de las noches que hice llorar a mi hija para que terminara durmiéndose sola, y de las mañanas que no despertaba con su carita de ángel al lado. Daria lo que fuera por haber colechado desde el primer día!
Disfruto durmiendo con ellas, abrazadas y besándolas cuantas veces quiera, que total, ya llegará el día que se vayan de casa y no pueda hacerlo!
Disfruto su infancia sin peleas por que se acuesten, ni lloros por que duerman solas.
Siento que hago lo correcto para mi felicidad y la de mi familia”

•“Por la lactancia, comodidad, por mi tranquilidad al sentirlo toda la noche, porque es lo mejor del mundo, por sus besos, por sus " mami te quiero mucho ", por sus " mami quiero tetita" jajaja. Y ya son cuatro años y yo le digo pero para que quieres tetita? Y dice pues para bebérmela para dormirme!”

•“Por toooodo... aunque tengo que reconocer que ahora que estoy de nuevo embarazada de 32 semanas... no estoy muy cómoda. Mi grandullón de casi 4 años es un torbellino y duermo o lo intento rodeada de cojines!”

•“Porque preferimos dormir, a mi hijo no le gusta dormir solo, y no pienso dejarlo llorando, así que simple, todos felices todos juntos, ¡todos durmiendo!”

•“Por la lactancia y porque definitivamente junto a nosotros es donde más segura está nuestra hija. Nada mejor que ver esa carita feliz en la mañana, nada.”

•“Convencimiento de que es lo mejor. Además de que nos encanta! me gusta acostarme al lado de él y sentir su respiración. Verlo dormir. A la mañana cuando nos despertamos, el me abraza y me da besos. Jaja. Es hermoso.”


•“No podría dormir lejos de mi tesoro. Necesito saber que está bien, que no tiene frio, miedo o requiere de mí para algo”

•“Dormir abrazada a él sentir su calor de mi bebe ver q su mano agarra nuestros dedos sentir que somos felices estando todos juntos sentir ese sentimiento de protección y dormir feliz...”

•“El amor! el vínculo y el apego es hermoso! siento que está más segura mi niña al dormir con nosotros! y come su tetica a demanda! no tengo que estar levantándome a ver si está bien acostada! o arropada! no llora ni se asusta! puedo abrazarla y darle besitos dormida y ella suspira”

•“Empecé a pensar que podía ser lo mejor para ella, ahora de verdad sé que el colecho es lo mejor para todos”

•“Me siento muy tranquila sabiendo que están a mi lado, no se si podría dormir sin ellas, jejeje, como dice arriba Roberta. La mayor 5 años, la pequeña 15 meses y con teta. Para nosotros es lo natural, como el destete, ellas decidirán... Y yo las acompañaré.”

•“El estar cerca de mi hijo y que él se sienta protegido, la practicadas que me da para alimentarlo durante la noche pues seguimos con lactancia, no sabría dormir lejos de él, aunque hay días que quiere espació y por voluntad propia se va a la Cunita que está pegada a mi cama y cuando vuelve a necesitar mamar sólo lo regreso y ya!!!”

•“Con el primero, en un inicio fue por la lactancia, luego fue porque nos gustaba dormir juntos, me gustaba sentir que estaba ahí conmigo. Con la segunda por lo mismo, y hay veces que viene el mayor a la cama, aunque tengo q reconocer que no duermo muy cómoda con los dos porque nos falta espacio!”

•“Yo colecho para dormir mejor: la lactancia nocturna se hace muy sencilla y es maravilloso sentirla a mi lado”

•“Pues lo que me llevó a ello fue que cuando nació mi hija, me la puse encima y allí se ha quedado! No, en serio, ni me lo planteé...instinto de madre, creo yo. Y el papá al principio no lo acababa de entender, pero enseguida vio que era la opción más práctica para amamantar y para dormir... ahora está encantado de despertarse y que su niñita lo esté mirando!  Ya llevamos 16 meses y espero que sean muchos más, y que vengan hermanitos y dormir todos juntos. Y nuestro lindo gatito duerme también ahí, con nosotros. Con tanto amor quién no querría hacerlo? Para mí, despertarme cada día al lado de mi hija no tiene precio...y despertarme por las noche para amamantarla tampoco...”

•“Yo no lo hice...Pero cuando han estado malos, siempre he dormido con ellos y ahora cuando no concilio el sueño, me acuesto con ellos y duermo...Me encanta oírles respirar...Cada uno que haga, lo que a él y a su familia, les de felicidad...”

•“Empecé para facilitar las tomas nocturnas y hemos seguido porque tanto el papi como yo nos sentimos mucho más tranquilos”

•“Colecho con mi peque de 31 meses porque así fue desde que nació, no concibo otro sitio para que duerma (a pesar de tener cuarto, cama, ropa de cama)... la cama la agrandamos, ahora no tenemos excusas, estamos más cómodos...”

Como veis, hay respuestas para todos los gustos, pero el motivo que más se repite y que lleva a los padres a dormir con sus hijos es la felicidad y tranquilidad de despertar a su lado, de sentirlos, de oírlos respirar...
¿No será quizá que no solo son nuestros hijos los que necesitan dormir con nosotros, con su padres?
¿No será, quizá, que nosotros como padres, nuestro instinto nos hace necesitarlos cerca también?.
¿No será que, como en tantos ámbitos de la maternidad, la sociedad nos ha convencido de que lo mejor es permanecer separados, obviando, negándonos una vez más las necesidades primarias de permanecer juntos, de proteger a nuestras crías como mamíferos, como seres humanos que somos?
¿Podría ser simplemente que lo natural, lo normal en los seres humanos sea dormir con sus hijos?


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