Revista Comunicación

Dropshipping: ¿La Forma Inteligente de Crear una Tienda Online Barata?

Publicado el 09 febrero 2014 por Joseliron

Todo luto tiene algo perverso alicatado en la oscuridad de la vestimenta. El duelo es más firme cuanto más negros avanzan los días, cuanto más lejano parece aquel ocaso, cuando uno ya ha asimilado una pérdida irremediable y asume, que ninguna espera traerá de vuelta los dí tu tienda online (algo más personalizado) y pagar solo una vez, a ser totalmente dependiente de una empresa. Uno de los principales alicientes de tener tu negocio online es no tener que dar cuentas a nadie, y si tienes que pagar a alguien cada mes una cuota pierdes lo mejor que tiene trabajar en internet: la libertad (y el dinero).

 

¿Es el Dropshipping un buen sistema para generar ingresos con una Tienda Online o Web?

Claramente SI. El Dropshipping es un sistema que nos evita correr riesgos, ya que no necesitamos invertir en el producto. A lo sumo la inversión que haremos será la de crear una tienda virtual y la de posicionamiento en buscadores.

Debemos ser cautelosos para no caer en la trampa de los que intentan hacer dinero a nuestra costa. Te recomiendo no asociarte con empresas de Dropshipping que no te dan unos márgenes “reales” de beneficio netos a partir del 20% a no ser que el volumen de ventas previsible sea alto. De lo contrario estarás trabajando para ellos y con muy poco beneficio. Es importante encontrar buenos Dropshippers, que cumplan los plazos de entrega y sean serios y profesionales. Tu reputación como comerciante depende de ello, ya que debes recordar que para el cliente final el Dropshipper no existe. Tu eres el responsable de todo ante tu cliente.

Evita a toda costa involucrarte con empresas que te ofrecen la tienda y los productos a vender, todo listo y llave en mano, a cambio de un pago mensual. Ese es su negocio y hacen tiendas como churros, todos vendiendo lo mismo y con unos márgenes bajos. Es muy difícil que así salgas adelante. Lo más probable es que pierdas dinero en vez de ganarlo. Vender en internet no es tan fácil como te lo pintan, y especialmente si hay cientos de competidores vendiendo lo mismo.

Un negocio de éxito comienza por un estudio de mercado. Debes buscar qué necesita la gente y no está encontrando. O bien encontrar algo que la gente puede querer pero que todavía no lo saben.

Una vez hecho este primer paso, el segundo paso es encontrar un Dropshipper de confianza que quiera trabajar contigo.

Vender no es fácil ni en una tienda real, ni en una tienda virtual. Pero si eres astuto y lo haces bien puedes tener un negocio muy fácil de gestionar y que te da mucha libertad.

Espero que te haya sido útil este post sobre el Dropshipping. Es un buen sistema, pero como todo en la vida, requiere hacer las cosas bien para tener éxito. No se trata de intentar vender cualquier cosa, sino de encontrar el nicho de mercado adecuado y un buen proveedor. Una vez tienes esas dos cosas, necesitas crear una tienda online o página web donde vender los productos, y claro está, hacer que la gente interesada en tus productos visite tu tienda. Esto último puede hacerse pagando publicidad como la de Google Adwords o lo que es mejor aún, mediante posicionamiento orgánico en los buscadores.

Si te ha gustado y quieres compartirlo o darme algún voto positivo, te lo agradezco. Gracias por leer!

—————————————————————————————————ía tenía la esperanza de despertarme, de tomar como un sueño la muerte de Francisco Ayala, guardián literario, guerrero diáfano de letras y tinta. Con él veo que el camino hacia la necrópolis se lleva a un testigo, a un amigo, a una voz, a un donjuán de la fantasía.

Adiós, donjuán de la fantasía
Tan sólo hace unos días me hallaba ingenua, lanzando lianas y abriendo puentes entre La deshumanización del arte de Ortega y Gasset y su texto Cazador en el Alba... fascinada por su capacidad, abrumada por un soberbio dominio del lenguaje y la narrativa que lo ha capacitado para triunfar hasta en las áridas tierras de lo experimental. Si España pudo ser testigo de una literatura de vanguardia se debe a nombres como el suyo, como el de Benjamín Jarnés, como el de Antonio Espina o como el de Rosa Chacel... cuyos ecos se antojan tan lejanos que parece increíble que hayamos atesorado tantos años al literario secular. Ayala, el mismo que conoció a Ortega, que simpatizó con Azaña, ése granadino que, a pesar de todo, se definió siempre independiente y cuando hubo de mostrar su compromiso, regresó de Chile para defender su ideal democrático.
Pertenecía a esa esfera de deslumbrantes ilustres, a ese escaparate selecto en el que los grandes pensadores de otra época hicieron de su inelectualidad un compromiso social. Y en lugar de desdecender de su torre de marfil, prefirieron intentar elevar a España -Oh! esa España humilde y castigada- hasta su atalaya de progresos. Y con el cuerpo aterido por el frío de los años, con el temblor innato de la cercana muerte, su pensamiento se mantuvo lúcido y gallardo... tanto que, es cierto, semejaba un ser inmortal. Pero como él mismo describía en Cazador en el Alba “la pianola realizaba a conciencia su trabajo digestivo, tranquila, en un rincón”. Y así devino lento y aquejadumbroso -como si no se lo quisiese llevar- ese fantasma cetrino que ha inspirado este óbito. El corazón de la literatura se ha quedado frío, mudo, ha sentido la taquicardia y el temor y el viento en las tardes heladas arrancando de los árboles “aceradas hojas de Gillette”. El consuelo del escritor es siempre triste y su luto, eterno. Porque su espectro, su ser deshilachado en palabras, todavía puede oírse y sentirse en el irremplazable legado de su escritura. —

as de color. Creo que hasta ayer todav

 


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