Las distribuciones más habituales de los áticos dúplex son a la inversa, con los dormitorios en el piso superior y las zonas comunes, cocina, comedor y salón en el inferior.
En cuanto veáis las fotos veréis como no desentona en absoluto esta distribución, en realidad importa poco si bajamos o subimos a dormir ¿no?
El piso de arriba es una zona abierta fantástica, llena de luz y amplitud, con zonas definidas por la propia arquitectura singular del edificio y el mobiliario. Todo está accesible y a la vista, pero no apiñado, sino bien definido y con el espacio suficiente en cada zona para casi, casi no molestar si hay varias personas realizando diferentes actividades.
Otra gran cualidad de este dúplex es el acceso a la terraza desde este piso superior, donde debe estar en este caso particular, un salón exterior bastante amplio, que complementa estupendamente al interior en los días más cálidos.
¿Qué os parecen los dúplex con las zonas comunes arriba, os gustan así o mejor al revés? ¡Feliz martes!
Vía: Behrer & Parterns
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