Eco-sexuales

Yo lo llamaría naturafilia, éste amor a la naturaleza que llevó a un grupo de personas en Australia a “hacer el amor” con la madre tierra, con la idea de no verla más como madre sino como amante.  La práctica no requiere precisamente penetración con plantas ni actos sexuales explícitos, sino el simple hecho de amar y conectar con la naturaleza, tanto corporal como espiritualmente. Aunque algunos incluyen actos sexuales y llegan a concluir en orgasmos. El movimiento ” Eco- sexuals”, iniciado en Australia quiere enseñar al resto del mundo sobre esta modalidad para generar conciencia sobre el cuidado y el amor hacia la naturaleza. Sirve para todos “aquellos que encuentren a la naturaleza sensual y atractiva”, según los representantes de dicho movimiento.

La corriente “Eco-sexuals” se inició en una página web ecosexuality.org , allí un grupo de cuatro personas bajo el nombre pony express llamaron la atención de todos con la siguiente pregunta: ¿Qué mejor manera de conectarse con la Tierra que a través del sexo? … Y lograron llevar sus ideas a cabo. La idea principal que los caracteriza y que recorre las redes es ” Aprender del amor a la Tierra para así poder salvarla”. Para ésto realizan un sexo meditativo de actos íntimos y contacto sobre el suelo, ligustros o árboles.  Acarician suavemente una flor o abrazan a la vegetación, a su vez se tocan a sí mismos o entre sí.

Hay varios sitios web dedicados a este tipo de movimiento, grupos de personas que exploran lo que puede significar Eco sex y cuentan sus experiencias. ” El sexo vende, por lo que si tenemos una motivación erótica para la conservación permanente de nuestro medio ambiente, entonces tal vez el juego sería lo suficientemente alto como para fomentar la acción global” dijo la artista visual californiana Loren Kronemyer, inpulsadora del movimiento,  en el comunicado de prensa de Pony Express.

La corriente inspiró una obra teatral llamada Ecosexual Bathhouse, que será protagonizada por los cuatro artistas de Pony express y se llevará a cabo entre el 6 y 16 de mayo en el Real Jardín Botánico de Victoria en Melbourne, Australia.

Lo único que tengo para decirles es : CUIDADO CON LOS CACTUS.