Revista 100% Verde

El aguante de los seres menores

Por Cooliflower

22 de julio de 2015

"Resiliencia" era una palabra casi desconocida hasta hace pocos años, lo que era una buena señal. Los padres de nuestros padres ya la llevaban de serie. En sus tiempo no había terapias, amigos cabroncetes, ni drogas con receta. O te sobreponías, o te sobreseían tus funciones vitales (p'al hoyo).

En psicología la resiliencia se define como la capacidad que tenemos para adaptarnos a una situación traumática, es decir: pasar página, no mirar hacia atrás, ser positivo, no comerse la cabeza, al mal tiempo buena cara y a otra cosa mariposa. En resumen un "volver a empezar", como dijo aquel hombre al que preguntaron "¿y qué hará ahora?" tras el tsunami de Indonesia, en el que lo perdió todo, incluyendo a su familia. Los lamentos no tienen cabida cuando no hay tiempo para lamentaciones.

La naturaleza lleva mostrando su resiliencia desde que la primera célula apareció sobre la Tierra. La evolución de las especies es una constante demostración de cómo pasar página y mirar hacia adelante, ya sea cambiando branquias por pulmones, o afeitándose las piernas para pillar cacho y obtener un "OK" en el arte de dejar descendencia.

Lo que no había eran pruebas comparativas de cómo el legendario aguante de este planeta se iba modificando por el comportamiento del ser humano. En Science Daily han encontrado las evidencias que nos incriminan, fosilizadas. Hace 13.000 años, en el periodo de calentamiento global tras la edad de hielo, las comunidades de mamíferos permanecieron estables. Desde 1.800, por el contrario, los ecosistemas se ven muy afectados de manera rápida, radical. Según todos los estudios los responsables somos nosotros, los monos depilados. Debido al mal uso del suelo hacemos que la resiliencia sea menor, es decir: no permitimos que unas especies compensen la pérdida de otras.

Los hermanos mayores de los seres menores tenemos un responsabilidad terapéutica, cooliflowerense... al resto del planeta no le alivia ni el prozac, ni una terapia de diván.


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