El día en el que los modernos subvencionaron la Rolling Stone

Hay varias cosas que me han motivado para escribir esta entrada poco después de levantarme traumatizada por soñar con colaboradores de Telecinco zombies hambrientos, como el subidón de adrenalina por apurar mis últimas horas de posible estudio para el examen de mañana en una entrada que seguramente deje a mitad y continúe por la tarde, pero la tenía pendiente después de haber leído hace unos días la crítica de la Rolling Stone a My Chemical Romance, a cuyos redactores parece serles suficiente una actuación en directo en el Dcode para valorar su aparentemente ¿similitud? con El Canto del Moco, el grupo del que se tinta el pelo de amarillo pollo porque soy un rebelde.
En primer lugar, la descripción del grupo como 'rock pijo para adolescentes' es una contradicción bastante curiosa al mantener su comparación con El Canto del Moco, que de rock tiene lo que Britney Spears de camionero (aunque su voz no se aleje mucho de ello en algún que otro directo). Por otra parte, si lo que ha sido ese artículo es una oportunidad para criticar el nuevo (y muy diferente) disco de My Chemical Romance creo que deberían haberlo expresado claramente. La verdad es que comparar las canciones del grupo de Nueva Jersey con las de los Álex Ubago con guitarras eléctricas, ídolos en potencia de maniquís y payasos con los pantalones por las rodillas y camisetas ceñidas de D&G es bastante desacertado comparando, por poner un ejemplo, las deprimentes, reflexivas y críticas letras de MCR, incluyendo temas como el bullying, con las del grupo de Dani 'TengoQueIrAlLogopeda' Martín, que atañe las tan graves preocupaciones de hoy en día de entrar en un 'garito to guapo' con zapatillas o de esa novia de hace dos días que ha decidido dejarte.
Por otra parte, la Rolling aprovecha para sacar puntilla al polémico tema de "Si son adolescentes y les gusta la música solo es porque se les caen las bragas al ver al cantante". Quizá nadie les haya dicho que la música se escucha por los oídos, pero qué se puede esperar de una revista de "rock" que saca en la portada a Lady Gaga. Pido un aplauso para la Rolling y a la pasta que les pagan los grupos españoles de modernos para esos abrumadores halagos y esas portadas desplegables en las que aparecen de protagonistas.
Y por hoy, esto es todo. Y voy a poner "perdón si alguien se siente ofendido", haciendo honor a la Rolling Stone, y así quedo bien.