El edificio 14

En el año 2008 tomé, con la ayuda de mis padres, una importante decisión, cambiar la Universidad de La Laguna por la Universidad Carlos III. Ese viaje académico y personal ha terminado resultando definitivo en mi vida, puesto que ahora no entiendo mi futuro a medio y largo plazo sin las personas que durante estos siete años he ido conociendo en Getafe.
Mi madre y mi padre, a quienes les debo todo, nunca tuvieron la oportunidad de acceder ni siquiera a estudios de secundaria. Son personas trabajadoras, muy trabajadoras, que sin embargo han podido ofrecernos a mi hermano y a mí la posibilidad de formarnos en lo que nosotros mismos hemos decidido. Y pudieron hacerlo gracias a un mecanismo fundamental en nuestro desarrollo social como país, las becas universitarias. 
En la UC3M tuve la oportunidad de ser alumno de grandes profesionales de la comuicación y también de grandes profesores, y no pagué ni un euro por ello. Las becas que las élites sociales y políticas insisten en eliminar, nos han permitido a millones de jóvenes formarnos. Y los que no lo han hecho al menos han tenido la oportunidad de elegir, una oportunidad que nunca tuvieron nuestros padres. El Estado de Bienestar debe sostenerse en un sistema de equidad y las becas universitarias lo representan a la perfección. 
Durante mis estudios de Grado en Periodismo, el edificio 14 del campus de Getafe, se utilizaba para las clases magistrales. La teoría, los análisis, los debates, la experiencia de los profesionales de la comunicación y muchas horas de reflexión.

Sara Hernández, candidata del PSOE en Getafe

No había vuelto al edificio 14 desde que acabé mis estudios, pero hay recuerdos que nunca se borran. Junto a Sára Hernández y Pedro Sánchez me han vueto a la cabeza los días en la biblioteca, el aprendizaje y, por qué no, también los momentos de disfrute. La etapa universitaria es una experiencia irrepetible, una experiencia que muchos nunca habríamos podido vivir sin el sistema de becas (mejorable) y la promoción de una educación pública y de calidad en España.
Muchos jóvenes, desencatados con razón de la clase política, no son capaces de marcar una diferencia clara entre las políticas de izquierdas y de derechas. Incluso ahora pretenden acabar con esa lucha de clases, pero la realidad es más tajante que todo eso. La izquierda, con sus innumerables fallos, trabaja por el bien social, por la igualdad y la equidad. La derecha trabaja para las grandes fortunas, con recortes sociales y con privatizaciones.
Sin becas, sin educación pública, sin universidades yo no sería capaz de haber escrito esto y solo por eso ya merece la pena el esfuerzo de mi madre y de mi padre.

Asamblea Abierta con Pedro Sánchez y Sara Hernández en el edificio 14 de la UC3M