Revista Opinión

El elegido y el que se distinguía entre todos

Publicado el 18 abril 2014 por Purasvitae @PurasVitae
El elegido, asomado a la ventana del palacio, veía el lugar donde se decían estaban los restos de su padre. Pidió a su intimo circulo le informara como estaban las cosas: “Presidente seguimos descoñetando a los estudiantes aunque ellos siguen respondiendo y aguantando. Jefe estamos despachando la mitad de la gasolina, casi todos lo traemos a Caracas. Presidente la escasez está empeorando, estamos esperando que Pepe (Mujica) nos mande un barco.” Pero el elegido sentía que algo más pasaba y no alcanzaba a ubicar que era.

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Caracas Ciberturista - Venezuela)

Pasaron los minutos y una voz femenina, la mano que mece la cuna, replicaba: “Esto es de locos, parece que no está el Nazareno de San Pablo en la iglesia de Santa Teresa”. Aunque él no nació acá y pasó varias temporadas en Cuba, sabía de la fuerte influencia del Nazareno entre los venezolanos y especialmente los que nacieron en Caracas, sintió un frio en el cuerpo, como cuando mandaron a desconectar a su amado padre. Un segundo después recibió la llamada del Cardenal:

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Noticias 24 - Venezuela)


-         Presidente, Dios lo bendiga, se robaron al Nazareno y mañana es la procesión, no tenemos tiempo de ubicar ninguna replica, necesitamos vuestra ayuda. No hubo destrozos, simplemente no está, estamos revisando si es interno.
El presidente ofreció su ayuda y estarían en contacto.
La Basílica de Santa Teresa queda cerrada mientras los feligreses se reúnen fuera de ella como si esperaran el humo blanco del Vaticano: Hay Nazareno. 

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Confirmado - Venezuela)

El presidente proclamado aunque enfrentaba una fuerte crisis se sentía seguro porque aun los militares no estaban a por la labor de sacarlo y el despertar de la gente se está prolongando más de los pronósticos iniciales. Aunque no creyera, la ausencia del Nazareno le asustó y lo puso a pensar lo peor, hasta en llamar a los jefes de la isla a ver que harían ellos en su lugar.

Mientras se armaba un fuerte despliegue militar en la Basílica, las inmediaciones del palacio quedaban con mínima seguridad. En un dos por tres hubo una protesta frente al palacio, los que estaban ahí aseguraban que se parecía al 19 de abril de 1810, salvando las distancias. Sacaron a las fuerzas de choque y represión y como de costumbre lograron disolver la protesta tomando a tres manifestantes: Uno de ellos se distinguía entre todos, no abría la boca y aunque recibió golpes hasta el cansancio, se mantenía de pie con la mirada al infinito.
Estando con fuerzas mínimas, el jefe de la casa militar en palacio se comunicó directamente con el elegido:
-   Presidente, hubo una protesta sorpresa pero ya la repelimos, tenemos tres detenidos: ¿Los soltamos, les sacamos real, los mandamos al Helicoide o les metemos sus coñazos acá?
Con algo de molestia el presidente proclamado afirmo:
-   Hagan lo que les dé la gana, pero me los sacan de acá.
Se llevaron a los tres hombres al Helicoide, en el camino los insultaban pero cuando lo hacían con aquel que se distinguía, se les atragantaba el habla y seguían con los otros dos. Llegaron al Helicoide, coñazos hasta la sangre y a sus jaulas.

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Wikipedia - EEUU)

Cuando aquel que se distinguía puso sus pies dentro de su celda se escuchó un ruido profuso en toda la ciudad. Alguno creyó que era un terremoto, los radicales políticos decían que era un golpe de estado. Mientras estuviera en su celda el ambiente ya pesado de aquel recinto se hizo casi insoportable. Los jefes se llenaron de un terror inexplicable y llamaron al jefe que lo trajo de palacio:
-   Hermano, llévate a este tipo de aquí, esta vaina parece brujería o santería y ni lo queremos tocar. -   ¿Pero qué carajo quieres que haga? ¿Que lo meta en una celda acá en palacio?-   Ya lo están montando en la unidad y allá te lo llevan.Colgaron.
Los que lo vieron decían que tenía un rostro familiar, con una tez morena y un semblante amable y tierno. No se atrevían a hablarles, el miedo les podía, solo alcanzaron a escucharle:
-   No teman.

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Wikipedia - EEUU)

Llegaron a palacio y de una lo llevaron a las celdas que tienen en los sótanos. Se respiraba perfume a rosas y aunque querían insultarlo y torturarlo, se quedaban detenidos ante Él, como dormidos. Mientras arriba el presidente proclamado sintió la necesidad de ir al Salón Sol del Perú, llegó a pensar que aquel que lo eligió quiso que fuera para allá.

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Venciclopedia . Venezuela)


Entró al salón y vio a un hombre sentado en un lado y volvió a sentir ese frio que ya había sentido más temprano. Antes de recriminarle por su presencia en dicho salón escuchó:

-   ¿De verdad te crees el elegido?Silencio sepulcral y respondió:-   ¿Pero quién carajo eres? ¿Cómo entraste aquí?-   Estoy en todos lados, puedo estar aquí, puedo estar en el Helicoide o puedo estar en la Basílica, ¿Te suenan esos tres sitios hoy?-   Sí, pero ¿Quién eres?-   No importa quién soy, importa quién eres tú y qué estás haciendo por los tuyos.De nuevo un silencio sepulcral y mientras se aproximaba a aquel que se distinguía pero que no podía verle el rostro le argumentó:-   Soy el presidente de la república, me eligió el padre de la revolución y el pueblo mismo.-   ¿Estás seguro? Yo lo sé todo ¿Por qué no me dices la verdad?-   ¿Quién eres tú? ¿Qué vaina es esta? ¿Dónde está la seguridad del palacio?-   Tranquilo, todos duermen, acá estamos solos tu y yo.-   ¿Qué quieres que renuncie? ¿Me vas a matar?-   No, aunque quisiera que resucitaras.-   ¿De qué carajo me estás hablando?-   Quiero que te liberes de todo el daño que has hecho, de todo el pecado que te rodea.-   Acaso eres Dios, ¿Quién te crees que eres?-   Tú lo has dicho.-   Si eres Dios ¿Por qué no te muestras como eres?-   No hace falta, cada uno me ve y me vera en su momento.-   No eres Dios ni nada, eres una alucinación mía, tantas pastillas para calmarme.-   Esas pastillas que tomas no te calmarán.-   ¿Qué lo haría?-   Que dejes de engañarte y especialmente que dejes de engañar a los demás, a los que creen en lo que tú crees y fundamentalmente a esos que no creen en lo que tú crees.-   ¿Por qué dices que engaño? -   Porque lo sé todo, hasta aquello de los que no me conocen.La ira invadió al heredero y trato de abalanzarse hacia el que se distinguía entre todos:-   Te voy a destruir, no vas a poder conmigo.
De repente se encontró tirado solo en el salón. Al ponerse de pie lo ve enfrente, vestido de morado, aunque no podía distinguirle el rostro – e igual no lo reconocería – si podía verle la mirada y escuchó:
-   Crees que porque estás aquí y porque algún otro te eligió, estarás libre de culpas. Aquel que hace daño a los demás, bajo el engaño de hacerles el bien, estará contra mí el día del juicio y cada uno de ustedes tendrán su día de juicio. Si te arrepientes estaré contigo en el día del juicio. Escucha a la gente, especialmente a aquellos que no temen morir, los que masacras en las calles, su voz es mi voz. 

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: El Mundo de la Noticia - Venezuela)

Aquel hombre se quedó estupefacto, se le vino a la mente los suyos, los de verdad. Se le nubló el pensamiento y cayó al suelo. Cuestión de minutos y se puso en pie, justo cuando entró seguridad a aquel salón y preguntó:

-   Aquel que estaba acá conmigo ¿dónde está?-   Por el Salón de los Embajadores vimos salir a un Señor, de morado, alto, piel morena pero nos quedamos como congelados.-   ¿Lo dejaron ir?-   Nos dijo que no temiéramos, que todo va a estar bien.
Se volteó y se fue a su ventana, recibiendo la llamada del Cardenal:
-   Señor presidente, disculpe la molestia, no entendemos que pasó pero el Nazareno está aquí, es como si hubiese salido y entrado caminando sin que nadie lo hubiese visto. Lo único que nos parece extraño es que en la entrada de la iglesia habían los pasos de tres personas.-   Me alegró por ustedes, mandare a sacar a los militares y dejare una guardia por si acaso.
Un feligrés que estaba en las afueras, dice haber sentido un golpe y creyó ver volar a San Miguel y San Rafael. El presidente proclamado no salió más de palacio ese día, aquella mujer que dicen que es la mano que mece la cuna empezó a temerse lo peor, todo el relato que habían inventado de verdad se estaba cayendo y aquel, el elegido, recibió el aviso. 

El elegido y el que se distinguía entre todos

(Fuente: Noticias MSN Venezuela - EEUU)


Volver a la Portada de Logo Paperblog