El Emperador Haile Salassie prepara su regreso a Etiopía - 15/01/1941.

Camaradas,
Cinco años después de huir del país, el Emperador Haile Salassie se prepara para regresar a Etiopía de la mano de los británicos. Como si de un cazador furtivo se tratara, ha sobrevolado de noche el territorio de Sudán y aterrizado junto a la frontera etíope a las 11 de la mañana. Una delegación de bienvenida compuesta de oficiales británicos, jefes nativos y tropas del ejército regular de Etiopía le ha recibido nada más tocar tierra.
Haile Selassie regresa a Etiopía... como un cautivo de los ingleses.
Haile Selassie posa sobre una bomba sin estallar.  Toda una metáfora de la catástrofe que está a punto de desencadenar sobre su patria con la colaboración con los británicos.
El Emperador había elegido el exilio tras la exitosa invasión italiana de 1935 después de solicitar en vano ayuda a la Sociedad de Naciones. Hoy mismo ha emitido una proclamación urgiéndole al pueblo etíope rebelarse contra los invasores italianos ante la inminente ofensiva británica: “Italia se encuentra arrinconada por el fuerte brazo de Gran Bretaña en tierra, aire y mar. Los italianos no escaparán a mis fieles guerreros.”
Tú eliges, Etiopía: salud y prosperidad al lado de una Italia Fascista triunfante...
...o hambre y miseria de manos de Haile Selassie y los plutócratas que lo apoyan.
Haile Selassie, que ha llegado acompañado por sus dos hijos, ha agradecido al gobierno y al pueblo de Gran Bretaña su apoyo en estas “amargas pruebas”. De este modo, el hombre que había estado viviendo en Bath como un simple Señor Smith (en una mansión de 14 habitaciones, eso sí) vuelve a ser “Su Majestad Imperial – León de Judah, rey de Reyes de Etiopía”. Los británicos esperan que su vuelta impulse las revueltas contra el Imperio del Duce.  Desde aquí queremos hacer el llamamiento a los etíopes-abisinios que no cedan ante las tentaciones capitalistas y no se dejen arrastrar hacia un supuesto movimiento de liberación que sólo les llevará a la ruina y a la más misérrima de las pobrezas.
Viva l’Italia!Viva l’Abisinia!