Aunque probablemente París sea hoy noticia por otro motivo, la ciudad de las luces es también protagonista por el lanzamiento de un método revolucionario en el mundo del transporte público: el Autolib’. Se trata de un servicio libre de alquiler de coches eléctricos inspirado en el exitoso sistema de bicicletas Vélib’, inaugurado en 2007.Tras una fase de prueba iniciada el pasado 2 de octubre, 250 autos de tipo Bluecar, fabricados por el grupo francés Bolloré, están a disposición de los parisinos con el fin de animarles a cambiar su automóvil por este vehículo económico y ecológico. Según el alcalde de París, Bertrand Delanoë, esta práctica permitirá que haya “menos coches aparcados, menos aglomeraciones y menos contaminación”.El funcionamiento es muy sencillo y como el de Vélib’: sólo hay que acudir a una de las 250 estaciones localizadas en 46 comunas parisinas, coger el vehículo y depositarlo en otra. Cada mes se instalarán más Autolib’, hasta llegar a los 3.000 y 1.200 estaciones en mayo del año que viene. La tarifa se aplica por cada media hora de uso (la primera cuesta 5 euros y la segunda 4), aunque también está la posibilidad de abonarse anualmente pagando 12 euros al mes. La única condición es tener permiso de conducir.A pesar de que este sistema self-service ya existe en otros lugares, como Nueva York o Holanda, la innovación francesa va mas allá del carácter eléctrico del vehículo. Y es que éste está dotado de una batería de nueva generación litio-metal-polímero, con una capacidad de almacenamiento cinco veces superior a la de su competencia. Vincent Bolloré, su creador, ha invertido 1.500 millones de euros para lanzar este coche, fabricado en colaboración con la empresa italiana de diseño automovilístico Pininfarina.
Ver vídeo de demostración del Autolib'.
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