El gruñón

El gruñón piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor. Un día se cae por las escaleras del sótano y se rompe el tobillo. Esto significa que debe ir a Helsinki convivir con su familia, un hijo blandengue y una nuera. Una anécdota pequeña que da lugar a una cinta también pequeña, pero ciertamente entretenida. El carácter protagonista es a la vez conmovedor e inaguantable, nos exaspera y emociona a partes iguales, en buena medida porque seguramente nos recuerde a alguien conocido. Por último mencionar el seco humor, que aligera los lados más oscuros y tristes de esta historia sobre la vejez y las ganas de seguir viviendo. 
Puntuación @cineEnCines: 8/10