Revista Opinión

El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón.

Publicado el 22 marzo 2017 por Emethgolem @NombredeIsrael

Una de las cosas que mejor encasilla a un racista acomplejado de serlo es su imperiosa necesidad de demostrar que no lo es. Para ello sueltan la mañida frase yo no soy racista, … ¡Algunos de mis mejores amigos son negros!”  que precisamente acaba convertida, en no pocas ocasiones, como marchamo de autenticidad de comportamientos o pensamiento racistas. Lo curioso es que seguramente tengan razón, y sea cierto que muchos racistas tienen amigos negros … siempre y cuando esos amigos negros acepten un status de inferioridad.

Algo parecido pasa con esos antisemitas con problemas de conciencia, que gustan de definirse como “solo” antisionistas. Como si el hecho de ser anti sionista fuera menos xenófobo o discriminatorio que ser “solo” anti ruso, “solo” anti francés, o “solo” anti chino.

Este comportamiento de personas plenamente conscientes de su miseria moral a la que, sin embargo, son incapaces de renunciar y por lo tanto necesitan justificarlo, es recurrente en la organizaciones radicales de izquierda y en el BDS que tanto adoran y que, por supuesto respaldad y apoyan.

El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón. El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón. El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón. El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón. El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón.

Huelga decir que el BDS es una oscura organización que difunde un mensaje de odio basado en la discriminación y la xenofobia, que justifica la violencia terrorista y que su ideario es furibundamente anti sionista al no reconocer el derecho a existir del estado de Israel.

O dicho de otra forma, el BDS al que apoyan los radicales de izquierda no acepta la solución de dos estados reconocida por la ONU, a la que, curiosamente, tanto aluden y con ello niegan a Israel el mismo derecho a la existencia.

El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón.

El caso de Gijón.

Recientemente, en la ciudad de Gijón, un acuerdo de colaboración con el ilegal boicot de Israel fue promovido por las organizaciones extremistas de izquierda Podemos (Xixon si Puede) e Izquierda Unida. Dicho acuerdo fue final, y felizmente, removido por la corporación en un esperpéntico pleno municipal que acabó con el abandono de todas las fuerzas políticas excepto el PSOE y Foro Asturias, cuyo comportamiento en este asunto solo merece una palabra: cobardia.

Dolidos por el fracaso de su mensaje de odio, el BDS, como mal perdedor, inicia una pataleta incitando a la población a manifestarse contra Israel el mismo día en que se juega un partido de futbol entre las selecciones española e israelí en el estadio gijones El Molinón en un acto absolutamente irresponsable y que demuestra que al BDS las reglas de la democracia, la seguridad de Gijon, de sus ciudadanos, y la noble competición deportiva  les importa menos que nada.

La necesidad de demostrar que no se es xenófobo ni antisemita.

Y para demostrar que estos intolerantes no son antisemitas, sino “solo” anti sionistas, para demostrar que no tienen nada en contra de los judíos, sino que solo están en contra de que los judíos tengan algunos derechos (que no niegan a ningún otro pueblo del mundo por supuesto), sacan a en una rueda de prensa, incomprensiblemente ubicada en el Ayuntamiento de Gijón, a un señor judio, Hector Grad (cuyo “misilístico” apellido evoca inevitablemente la solución final que Hamas reserva a todos los israelíes) el cual  asume su condición de dhimni, como un Untermensch del BDS, de judío sumiso que renuncia a sus derechos y pretende obligar a que el resto de judíos también lo hagan y que, sin sonrojo alguno, apoya al movimiento BDS en la negación de esos derechos, ejecutando a la perfección el papel de títere judío de una organización que  se caracteriza por  la xenofobia en una lamentable “performance” de odio mostrando tarjetas rojas y excluyentes para la selección de Israel.

El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón.

El sectarismo de los presuntos defensores de los Derechos Humanos.

Y es que estos presuntos solidarios con las causas nobles, estos seres etéreos, cuasi angelicales de Podemos e Izquierda Unida, preocupados por los derechos de un inventado pueblo palestino son absolutamente incapaces de proponer algún tipo de boicot contra las peores dictaduras del mundo a las que dan cobertura moral en no pocas ocasiones

¿Para cuando un boicot contra la Venezuela chavista por la vulneración de derechos del pueblo venezolano por el gobierno de Maduro?

¿Para cuando un boicot contra la Cuba castrista por tener sometida a toda una isla en una atroz dictadura?

¿Para cuando un boicot contra el criminal régimen sirio de Assad por los cientos de miles de muertos que ha causado?

¿Para cuando un boicot contra la dictadura china por someter el Tibet y aplastar a su propia población?

¿Para cuando un boicot contra la delirante tiranía comunista de Corea del Norte?

Es mas …

…¿PARA CUANDO UN BOICOT CONTRA LOS MAYORES VIOLADORES DE LOS DERECHOS DE LOS PALESTINOS, esto es, contra las organizaciones terroristas (Fatah y Hamas) que los tienen sojuzgados, sometidos y condenados a vivir en sendos regímenes dictatoriales que los usan como escudos humanos, como carne de cañón, que envenenan la mente de sus menores con el odio, el culto al terror y el antisemitismo?

Lo que no espero nunca es que esta gente plantee un boicot contra aquellos que niegan los derechos a los israelíes, entre ellos los más básicos, como el derecho a la existencia, a vivir o tener su propio estado en paz.

No, para ellos los israelíes no tienen derechos.


El insoportable hedor antisemita de la izquierda radical inunda Gijón.

Volver a la Portada de Logo Paperblog