Revista Opinión

El madridismo no es sino un fascismo

Publicado el 17 agosto 2011 por Romanas
El madridismo no es sino un fascismoSi éste no fuera un país absolutamente degenerado por ¿siglos?de ocupación de todos los espacios posibles por un fascismo esencial-lo llamo así porque parece que forma parte de la prístina naturaleza de los españoles-un escándalo clamoroso se elevaría hasta el cielo, rebotaría en él y volvería a la tierra para destruirla ante tanta ignominia.Sucede que ya no el cinismo, nombre demasiado técnico para el vicio que nos aflige, sino el más absoluto de los descaros, el más salvaje de los desparpajos asola a esa inmensa mayoría de españoles que tiene a su cargo la canalización de las opiniones de tan sucia manera que no es que haga ya lo negro blanco sino que pretende que todo el universo asombrado vea cómo una nueva e increíble especie de fascismo se extiende por esta desdichada península porque todos los que contemplan el espectáculo desde fuera no  pueden creer, y no creen, que sea posible una mayor ejercicio de desvergüenza no ya popular sino social y política.¿Parece que estoy escribiendo de la política nacional, a que sí?Pues, no, escribo de algo mucho más importante, según Shankly, técnico del mejor Liverpool de todos los tiempos, que afirmaba que el fútbol no era cuestión de vida o muerte sino algo mucho más que eso: de lo que constituye la manera de ser, el ethos definitivo de un pueblo que seguramente va a pasar a la historia como el creador de una manera de ser tan mentirosa y falaz, que se atreve a gritarle al mundo entero que todo lo que éste ve en la Tv no es cierto sino la pesadilla de una lúgubre noche de invierno.No se puede hoy, con todo lo que sucede al alcance de las vista del universo, intentar que la sociedad global te admita como un pueblo serio, que cuente en el concurso mundial con una mediana aceptación, y actuar ante el orbe como una redomado reducto del peor de los fascismos.Porque el fascismo es, sobre todo y por oposición al izquierdismo, que busca la verdad y la justicia, tratar de sepultar la realidad bajo un inmenso montón de mentiras, de falsedades tan evidentes que constan ya para siempre en los archivos televisivos de todo el mundo.Porque es fascismo intentar retorcer la realidad y hacer ver al mundo entero que lo que él ve por televisión no es lo que sucede en el acontecer diario de este asqueroso país sino una distorsión que no se sabe por qué se produce cuando las cámaras de Tv enfocan la actuación del Real Madrid cada vez que juega uno de sus partidos.Se afirma que el fascismo, “plantea una sumisión de la razón a la voluntad y la acción, un nacionalismo fuertemente identitario con componentes victimistas que conduce a la violencia contra los que se definen como enemigos por un eficaz aparato de propaganda, un componente social interclasista, y una negación a ubicarse en el espectro político (izquierdas o derechas), lo que no impide que habitualmente la historiografía y la ciencia política sitúen al fascismo en la extrema derecha y le relacionen con la plutocracia...”. (Wikipedia).¿Habrá algo más razonable que admitir la realidad? Negarla es abjurar de la propia condición humana que tipifica al hombre como el único animal racional. Pretender ser lo que uno no quiere ser es una pura contradicción en los términos. E intentar falsificar la realidad actuando contra ella a base de mentiras sólo puede engañar al propio mentiroso, o, tal vez, ni siquiera pueda conseguir esto.¿Qué es lo que pretende el Madrid sustentando una y otra vez que es al Barça a quien favorecen los árbitros?Está muy claro: presionarlos hasta un límite absolutamente insoportable: el razonamiento es tan sencillo que da vergüenza ajena  tan sólo enunciarlo: “árbitros, mucho cuidado con lo que hacéis, si pitando siempre a nuestro favor, os hacemos esta sucia campaña de acoso y derribo totalmente insuperable qué no seremos capaces de hacer no ya si favorecierais al rival sino tan sólo si fuerais imparciales”.Pero este emporio fascista no se detiene ahi, en el umbral de su propia casa, con todos: entrenador, jugadores, directivos, presidente, afirmando con toda la desvergüenza del mundo, que los árbitros no sólo no les favorecen, tal como sucede en la realidad, a ellos descaradamente sino que lo hacen a su adversario. Además, ha puesto en práctica una estrategia realmente diabólica, sabedores del fascismo sociológico que domina a este país desde hace siglos, con campañas ultranacionalistas no ya periféricas sino centrales, ha encargado a los medios de información que difundan la especie más mentirosa del mundo: que el equipo del régimen político, sea el que sea, porque forman parte de él los auténticos detentadores del poder económico, está siendo perseguido a muerte por los órganos representativos del propio régimen, no importándoles nada la suprema contradicción que supone que sean todos los funcionarios que ocupan sus puestos directivos miembros salientes del propio organigrama madridista, hasta tal punto llega no ya su cinismo sino su desvergonzado descaro.Es el famoso principio de Goebbels: una mentira, repetida millones de veces siempre se impondrá a la verdad.Y, así, vemos cómo lo que escribe esta prensa que actúa, en este caso, como lo que realmente es,  absolutamente canallesca, trata de subvertir la realidad diciendo que esa terrible agresión que Kedira realiza sobre Abidal, estrellando los tacos de su bota derecha sobre la frente de su víctima, no es ni mucho menos equiparable a la que tanto denunció entonces, cuando De Jong le pateó el pecho a uno de los matones del Madrid, el inefable Xabi Alonso, que reparte agresiones intolerables a todo el que pasa por su lado.Mientras que el mucho más inefable aún, Sergio Ramos, prototipo de gitano chuloputas barriobajero, que, en el partido del 5 a 0 del Camp Nou, en las propia casa de su rival, pateó por detrás alevosamente a Messi y cuando acudieron a recriminarle su acción Xavi, Pujol, Iniesta y Pujol, todos ellos peligrosos salvajes por su juego sucio, los golpeó a todos violentamente en el rostro en presencia de cientos de millones de atónitos espectadores internacionales a través de Tv y no contento con esto, ahora, este señor que recrimina a Piqué que haga declaraciones en su lengua materna, que hace unas declaraciones y las termina con el típico saludo franquista de "arriba España", se descuelga ahora con todo el insuperable cinismo y desvergüenza de esta gente diciendo que Alves ensucia el fútbol porque se cae cuando ese criminal nato que es Pepe le hace una de las entradas más duras que nunca se haya visto.Y toda esa prensa canallesca calla, como calla también que el Bernabéu le hiciera durante todo el partido a Alves el sonido del mono, en clara alusión racista, lo que no debe extrañar ya que el racismo es uno de los componentes más significativos del fascismo como nos demostraron italianos y alemanes.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossiers Paperblog