El Marketing y el Diseño tienen una relación más importante de la que pensaba:

Sea en Diseño Web, Diseño Gráfico, Diseño de Producto, etc. He aprendido que diseñar no es sólo hacer cosas estéticamente bellas, sino que, sobre todo, es hacer útil un pensamiento. Es algo más funcional. La gente no compra productos, sino que le interesan las soluciones. Y, por ello, hay que pensar en algo que se vea como se desea y realice las funciones que se quiere para provocar una respuesta emocional positiva.

Para mí, “si el rey es el contenido, entonces el contexto sería la reina”. Y en el contexto entra también en juego el Diseño. Ya lo decía Steve Jobs, “la mayoría comete el error de pensar que el Diseño es el aspecto de algo. El Diseño es cómo funciona ese algo”, aseguraba. “El Diseño es el alma de todo lo creado por el hombre”. Debemos pensar que, en nuestro día a día, estamos rodeados de objetos que provocan emociones en nosotros. Todo ha sido producido por el hombre y responde a un diseño previamente estudiado. Debemos buscar la sencillez o minimalismo y no la simpleza, que no es lo mismo. La simpleza es vacía y la sencillez busca la máxima respuesta con el mínimo de elementos.

Lo barato puede salir caro. Si subestimamos el Diseño a todos sus niveles, las conversiones se reducirán. Por ejemplo, un restaurante puede tener buena comida para servir, pero si “el lugar no es cómodo” (sea por los objetos, la apariencia del personal, la ubicación, etc), entonces la conversión será menor. Lo mismo ocurre con el Diseño Web. No basta hacer una web, hay que saber también de Usabilidad, SEO, Analítica Web, etc. En Diseño Gráfico hay que saber también de jerarquías de tipografías, usos de los colores, ubicación de los elementos gráficos, etc. Asimismo, el Diseño de Producto es complicado en la forma en que quieres solucionar una necesidad y la trasladas en forma de producto. Éste es un error típico. El de la Miopía de Marketing. Se suele pensar antes en términos de producto que en necesidades a cubrir.

En definitiva, como decía Von Glitschka, “el Marketing sin Diseño no tiene vida. El Diseño sin Marketing no tiene voz”. Todo está interrelacionado. En mi opinión, las empresas que tienen buenas conversiones son las que han sabido conjugar bien el valor del Marketing, Diseño y la Estrategia. La creatividad es muy importante y creo que nace del robo de ideas (en términos de inspiración), pero pienso que la analítica lo es más. Es saber lo que realmente quiere el cliente. Es saber trasladar elementos donde los necesite el contexto y así crear nuevas dimensiones. Tomar ideas, pero no para usarlas de la misma manera. Integrarlas en un nuevo contexto, donde también funcionan. La finalidad es la creación de algo original a partir de un conocimiento del pasado.

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