El Ministerio de Economía le pone la zancadilla al “crowdfunding”

A ver si lo entiendo porque no lo pillo. Últimamente este gobierno no me deja tener un fin de semana tranquilo. Y como no me gusta el fútbol me paso la semana alimentando mi ulcera. Le llaman doctrina del shock, en resumen te doy una bofetada al tiempo que te digo que soy tu amigo y es por tu bien. Así cada viernes.

Hoy le toca al crowdfunding. Un mecanismo de financiación que se ha vuelto muy popular estos años, la forma de que muchos proyectos logran financiación a espaldas de métodos tradicionales. Gracias a éste ya no era necesario pedir dinero a los amigos, familiares o hipotecar tu vida para dar forma a un proyecto.

A través del crowdfunding han sido posibles proyectos como Raspberry Pi o que ciudadanos puedan financiar campañas de acusación como las causas populares contra Rato y Blesa. El abanico de opciones son muy diversas.

Pues bien, podemos olvidarnos. El Ministerio de Economía quiere regular el “crowdfunding” y ya sabemos cómo lo hará.

Sabemos que el máximo de financiación de un proyecto será de un millón de euros. Que parece mucho pero… Un ejemplo, la edición especial de Hero Quest ha logrado 680.000 euros superando los 58.000 marcados como objetivo. Y no podría olvidarme de “El Cosmonauta” que logró recaudar un total de 400.000 euros a través de diferentes rondas de financiación.

Seguimos, que esto tiene miga. Si quieres abrir una plataforma de crowdfunding en España deberás cumplir ciertos requisitos. El primero es que necesitas 50.000 euros de capital social o en su defecto un seguro de responsabilidad civil anual de 150.000 euros. A priori parece que se pretende defender al consumidor, para que si la financiación del proyecto en marcha no llega a su meta puedas recuperar tu dinero, caso de Ubuntu Edge. Ahora bien, también queda claro, si estás solo en tu plataforma lograr ese capital no será tarea fácil. Todos sabemos cómo está el crédito para emprender.

Y aquí llegan las tortas. La norma propuesta limita el numero de aportaciones por inversor/proyecto a 3.000 euros y 6.000 en todo el año para varios proyectos.

No cumplir esto supone multas de 200.000 euros y la prohibición de volver a la actividad durante 5 años.

¿Helados? Yo tengo mi ulcera de un happy…

En estos momentos la vía que lograba aliviar un poco el vació de financiación y acceso a ayudas que había en este país es justamente el crowdfunding. Esta regulación nos afecta a todos. Ciencia, innovación, tecnología, gente que tiene las cosas claras, que quiere emprender y no puede, etc.

Sorprende que en el resto del mundo muchos países buscan promover y adaptarse (caso de Francia) a esta “novedad” y en España sigamos con el modelo de zanahoria y palo.

Fuente: http://jenesaispop.com/