Revista América Latina

El Proyecto de Ley de Inquilinato, las invasiones y nosotros la clase media bolivariana como el jamón del sandwich.

Publicado el 03 octubre 2011 por Jmartoranoster
Publicado el 3 octubre, 2011 por juanmartorano Angélica Espin


Este artículo lo había escrito hace tiempo y no me atrevía a mandarlo, primera vez que me animo a escribir.   Margarita Espinoza, leí tu artículo en aporrea el sábado 10 de septiembre, y como tú quiero decir que soy revolucionaria de toda mi vida, por supuesto Chavista y me la paso de pelea en pelea defendiendo al proceso y  al Presidente,  porque, como dícen los Robertos, en este sector de clase media, los disociados agresivos, abundan.

Cuando leí tu artículo, inmediatamente me solidarice contigo, porque a mí me ocurrió algo parecido, pero creo que mas grave aún y eso hizo que mi salud se deteriora un poco, por la angustia y la ansiedad que viví. 

Cuando las lluvias de Diciembre, que fueron terribles, el Presidente por supuesto se apersonó en las zonas y mandó que la Guardia Nacional, de manera organizada, hablará con los hoteles para buscarle refugio a los compatriotas mujeres, viejitas, niños, lo cual era realmente una tragedia y había que resolverla. Pero también dijo muy claro que cuidado con estar invadiendo casas, apartamentos que las personas tenían para vacacionar, porque ya la canalla mediática estaba diciendo que “Chávez los había mandado a invadir y a apropiarse de estas viviendas”, y que quien lo hiciera tenía que ser desalojado y sancionado.

Bueno, Yo tengo dos apartamentos en Margarita, cada uno de una habitación, que los compré quitando un préstamo a la caja de ahorro y parte de mis prestaciones, porque soy profesora de la universidad, divorciada, con dos hijos y dos nietos. Cuál es mi sorpresa cuando me llama un vecino, el 3 de diciembre, y me informa que invadieron los apartamentos, rompieron rejas, cerraduras, y que estuvo organizado por el Consejo Comunal y un abogado, que según tenía una cuota de cinco apartamentos. Ninguno era damnificado de las lluvias. 

Claro yo soy Chavista y dije “Chávez ya informó que eso no podía ser”, y comencé los tramites regulares, me fui hasta Margarita,  pude ver a uno solo de los invasores, porque iba solo de noche, algunas veces, un hombre joven, que me estaba obligando a venderle el apartamento, porque él no tenia casa y la otra, que era su tía iba de vez en cuando, no la conocí sino al final de la historia.

Me dirigí a la Guardia Nacional a entregar la denuncia y me mandaron a la Fiscalía, teniendo mis documentos de propiedad. Nada, hice la denuncia en fiscalía y regrese a mi casa, ¡ah! tuve que pagar pasajes de avión, hotel durante cinco días y todos los gastos que eso acarrea. 

La fiscalía respondió por escrito y me llamaron a mi casa  a los quince (15) días, me pareció bien diligente y los felicito. Creí que ya con eso la situación se resolvía, me fui nuevamente a Margarita, ahora acompañada por una hermana, empezamos a buscar respuesta al oficio, primero en la fiscalía, de allí nos mandaron para el Comando de la Guardia fuimos a varios y no aparecía, ni la denuncia que había hecho, ni la respuesta de la fiscalía. Finalmente en uno, nos dijeron que allí estaba la respuesta de la fiscalía, pero no estaba firmada y quien lo hacía no estaba, fuimos al otro día y nos dijeron que volviéramos al otro día porque ahora era cuando lo iban a revisar. Ya teníamos cinco días y nada.

Se nos ocurrió, porque los vecinos decían, pero si esa gente no está allí, quiten los cilindros y pongan otros, no puedo dejar de decir que no nos asustaba la idea porque queríamos ir por el camino legal, pero ante la burocracia, decidimos arriesgarnos finalmente, porque además, en la guardia,  nos dicen que ellos lo que van a empezar es una averiguación, teniendo yo mis documentos de propiedad. 

Así que contratamos un herrero cambiamos cilindros, entramos sacamos lo poco que tenía el invasor, porque la invasora no tenía nada y sellamos las rejas con puntos de soldadura. Alguien les aviso, de los otros invasores, y llegaron dos hombres jóvenes, uno el invasor, el otro, el hermano, en tremendas camionetas, nos insultaron de p… para arriba o para abajo y lo mejor del cuento, que los del Consejo Comunal se lavaron las manos y decían que todos eran Chavistas. Lo primero que nos dijeron este par de jóvenes invasores, fue que “éramos unas Chavistas de M….que eso era lo que hacia nuestro Presidente que los mandaba a invadir y luego los sacaban”. Por eso digo que daño hacen algunos Chavistas cuando por beneficios personales hacen estas cosas.

No nos atrevimos a quedarnos esa noche, porque nos daba miedo, dos mujeres solas, fuimos a la policía y los denunciamos y seguimos al hotel. Como a las 7 de la noche nos llama una vecina que estaban tumbando las rejas nuevamente para meterse. Pasamos por la policía y pedimos apoyo y mandaron a buscar a una abogada de la policía. En efecto ya estaban adentro nuevamente, la abogada les dice que muestren sus papeles de propiedad porque están invadiendo propiedad privada y eso es delito, por supuesto no tenían nada. Me piden a mí los documentos de propiedad, los muestro y la policía y la abogada los manda a desocupar. Pero a pesar de todo y por la agresividad que tenían, estos se llevaron las rejas, sacaron las puertas de vidrio del balcón y la misma policía nos dijo “déjenlos lo importante es que desalojen los apartamentos”. Tuve que gastar para dejarlos enrejados nuevamente 20.000 Bs., que no los tenía.  

Reflexiono y digo mis hijos no tienen viviendas, ellos son profesionales, es más uno es médico cardiólogo graduado en el mejor instituto de Latinoamérica, ubicado en Brasil, el Dante Pazzanese, ya tiene tres años y no ha podido ingresar a un hospital, tiene que trabajar en privado y como lo explotan, a veces va al hospital a ponerle un marcapaso gratis a un paciente pobre y, de paso funda Ayacucho le dio beca. Pero bueno, así como, le es difícil el trabajo también la compra de una vivienda porque no hay políticas de vivienda para profesionales de clase media, mis dos hijos están tratando de construirse su futuro con su propio esfuerzo, como lo hice yo, trabajé duramente, dejé de comprarme cosas para tener mi casa y esos dos apartamentos, pero no he podido ayudar a mis hijos a comprar una vivienda, ellos están alquilados, pero saben que no se deben ni pueden aprovechar de eso para tener su vivienda, porque no sería digno, además ellos están con el proceso y jamás dañarían la imagen del Presidente ante una clase media que lo odia.

A esto se agrega que les están pidiendo desocupación, ya están en la prorroga legal y la gente no está alquilando porque temen que les quiten la casa y menos si tienen niños. Porque pareciera ser que esa ley está como muy confusa.  

Pero finalmente te digo Margarita, tú también recuperaras tu casa, porque tanto tú como yo sabemos que la intención del Presidente y del proceso no es irrespetar los derechos del otro, la intención es justicia y si esa ley sólo está amparando, como dices, a los inquilinos es necesario revisarla, porque entonces, ¿cómo nos vamos a ganar a ese sector de clase media o al que ya tenemos ganado; si lo vamos a afectar con la ley?.

Nada desviará nuestro camino de construir una patria justa para todos y el único que nos garantiza eso es “CHAVEZ”, por eso tampoco nada hará que cambiemos nuestra intención de voto. “Viviremos y Venceremos”.

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