En el 2008 escribí una entrada sobre Miguel y su primer amigo. Este amigo que eligió por él mismo, se llama Carlos, creo que a sus papis no les importará que de su nombre, ya que para ambos esa relación ha sido tan importante, que creo no merece menos. Os dejo el enlace de cuando hablé por primera vez de esta amistad por si a alguien le apetece leerlo.
La cuestión es que Miguel llevaba con Carlos muchos años, eran compañeros del aula CyL de Primaria, así que estuvieron compartiendo 6 años sus juegos, sus risas, sus enfados...
Este curso Miguel pasó al instituto dejando atrás una etapa, y entre lo importante de esta etapa, estaba Carlos. Ahora tendría que conocer a nuevos compañeros y ésto también será un reto.
Cuando volvimos de las vacaciones, Miguel estaba tan emocionado, Disney ha sido su sueño cumplido, que quería contárselo a todo el mundo, así que muy a menudo decía "se lo dices a la tía Dolo", "se lo dices a la tía MªEli", para quedar con ellas y poder contarles lo que había hecho. Así mismo también decía "se lo dices a Carlos: has visto a Blancanieves, has visto a Pinocho, has subido al tren de la roca........" Lo repetía mucho.
Empezó el instituto y como no estaba Carlos no se lo pudo contar, a pesar de contárselo a los nuevos compañeros y a los profesionales, Miguel insistía en que se lo quería decir a Carlos.
La semana pasada hicimos en ASPAU el encuentro de familias, así que confirmé que venía Carlos para poder anticipárselo, y se emocionó, se puso muy contento, enseguida dijo: "se lo dices a Roberto, el sábado se lo dices a Carlos has estado en el castillo de Disney...". Tan emocionado estaba que quería contarle a todo el mundo que por fin iba a ver a su amigo Carlos y que le contaría que había estado en Disney.
A partir de que se lo anticipé todos los días repetía "el sábado no hay ANJEL, vamos a ASPAU, se lo dices a Carlos, has ido al castillo de Disney..." y toda la retahila de atracciones que le gustaron.
En ASPAU también está el presi Juan Carlos a quién Miguel adora, Miguel habitualmente le llama Carlos, en cuanto lo ve lo busca para contarle cosas y si no está, pregunta por él.
En esta ocasión me decía se lo dices a Carlos, a Juan Carlos noooo, a Carlos. Aún a pesar de llamarlo siempre Carlos, ha sido capaz de cambiar el nombre para explicarme que a quién quería ver era al Carlos niño.
Llegó el sábado y Miguel estaba nervioso pero contento, llegamos de los primeros para organizar un poco las meriendas. Al poco me encontré con Carlos y sus padres, les comenté la emoción que tenía Miguel y ellos me dijeron que Carlos estaba en la misma situación, así que entramos y Miguel estaba al fondo de una sala muy grande, le dije ha venido Carlos. Me emocioné al verlo, porque salió disparado como una flecha, corriendo, enseguida empezó a contarle todo lo de Disney, después se fueron a la parte de cine de la sala y se sentaron a ver una peli juntos. no se separaron en toda la tarde, si uno se levantaba el otro iba detrás.
Para mi esto es todo un logro, valoro muchísimo cada avance en Miguel o por lo menos lo intento, pero el hecho de elegir a un amigo, de echarlo de menos, de insistir hasta poder verlo, de comunicarnos que quiere verlo sea como sea, me parece increible. Me planteo la visión que he tenido siempre de Miguel y a pesar de considerarme positiva, siempre encuentra como sorprenderme y como conseguir mi más absoluta admiración.