"Todo el mundo quiere volver a verme trabajar pero nadie quiere contratarme." Quién lo afirma es Chris Langham, por nombre puede que no oso suene, pero quienes seguís la excelente serie "The Thick of It" de la BBC (llevada a la gran pantalla por su propio creador Armando Iannucci mediante la desternillante "In the loop") desde luego, sabéis quien es. El 2 de Agosto de 2007 el entonces reputado actor británico era hallado culpable por la posesión de imágenes pornográficas de niños en Internet, y no culpable, de seis denuncias por agrasión sexual. Así, como suena. Tres meses después ganaba una apelación y lograba que le liberaran de condena tras permanecer únicamente tres meses y medio en prisión. No fue este el caso del panorama cinematográfico británico, en el que fue puesto en cuarentena hasta día de hoy. Tras 6 años de ausencia obligada, Chris Langham vuelve al ruedo. ¿Su película? "Black Pond."
¿De que va?
"Black Pond" es una existencial comedia dramática en la que una familia ordinaria británica y su amigos japoneses son acusados de asesinato cuándo un extraño muere en la mesa de su propio comedor.
¿Quién está detrás?
Debutan en el largo el video-artista Tom Kingsley y el también actor (secundario de lujo en "Black Pond") Will Sharpe.
¿Quién sale?
Al polémico gandor de dos Premios BAFTA Chris Langham, le acompaña Simon Amstell, doble ganador del British Comedy Award.
¿Qué es?
My Kingdom + La felicidad de los Katakuri
¿Que ofrece?
Según escribe Decca Aitkenhead en The Guardian; "cinco minutos sumergida en 'Black Pond' me ha hecho olvidar todo posible prejuicio y recordar lo extraordinariamente dotado que está Langham para la interpretación. Su caracterización es cómica y sobrecogedora, profundamente absorbente y anodinamente naturalista, vamos, como si las mejores vesiones de Alan Rickman y Steven Coogan se unieran en una misma. La película por su parte, resulta una delicia absoluta."
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