Valles de alta montaña junto a Puyvalador
(JMBigas, Junio 2011)
El Departamento del Aude ha acuñado una marca, amparándose en que todas estas tierras fueron la última residencia de los cátaros, que acabaron siendo prácticamente aniquilados por la llamada Cruzada Albigense a principios del siglo XIII, por cierto la única Cruzada que fue decretada por el Papa contra cristianos; considerados heréticos, eso sí.Esta marca o eslógan acuñado es la de Pays Cathare. Ampara lugares, emplazamientos y productos. En lo que se refiere, por ejemplo, a productos alimenticios, ampara a todos aquellos productos elaborados por completo en el Departamento, con materias primas del mismo origen.
Hasta ese punto tiene una cierta personalidad propia el Rosellón, ciertamente diluida en la concepción centralista del Estado francés. Y así se constituye en lo que menudo se conoce como la Cataluña Norte o, como prefiero llamar, la Cataluña de Francia. De hecho, un cierto catalán es una segunda lengua bastante utilizada en muchos lugares, y hablada por un porcentaje importante de la población. Aunque no tiene mucha más presencia pública que la testimonial denominación bilingüe de las calles en Perpignan y otras ciudades y pueblos, por ejemplo, o algunas inscripciones en catalán en casas particulares. Y, por supuesto, algunas manifestaciones culturales transfronterizas y pancatalanas.Desde el punto de vista vitícola, esa diferencia sustancial entre el Rosellón y el resto de la Región también es patente. La denominación de origen (AOC) genérica de la región (Languedoc, antes Coteaux de Languedoc) no aplica al Rosellón, que tiene su propia denominación genérica Côtes du Roussillon, así como la más específica Côtes du Roussillon Villages, con cuatro apellidos posibles: Tautavel, Latour-de-France, Caramany, Lesquerde. Aparte de otras más reducidas, como las dos próximas a la frontera española, en la Côte Vermeille (Collioure y Banyuls), o las que cubren los VDN (Vinos Dulces Naturales) como la Maury o los diferentes Muscat.
Fortaleza (Vauban) de Mont Louis
(JMBigas, Junio 2011)
Salí, pues, esa mañana de Carcassonne en dirección Sur, con la intención de adentrarme en el Rosellón. Todavía en el Aude, se cruza la población de Limoux, famosa por sus vinos blancos tranquilos y espumosos (blanquette y cremant de Limoux) que nada tienen que envidiar a los vinos de Champagne.Siguiendo la carretera D118, se cruza Couiza y Quillan, para adentrarse ya en zona montañosa, por el desfiladero de Pierre-Lys, impresionante con sus rocas en voladizo por encima de la carretera, que va siguiendo la cornisa del desfiladero.Más allá de Axat y de las Gorges de Saint Georges, la carretera, ya francamente de montaña, sigue la frontera del Aude con el departamento vecino de Ariège (09), hasta que cruza una franja de este para entrar en el de Pyrenées Orientales por las cercanías de Puylavadour. La zona es de alta montaña (de hecho hay una importante estación de esquí en Puylavadour) y el paisaje de los amplios valles verdes con algunos lagos es de gran belleza. Por cierto, la temperatura aquí era unos diez grados inferior a la de Carcassonne por la mañana.La carretera hasta Mont Louis deja a su derecha el lago de Matemale, hasta llegar frente a la antigua fortaleza (obra de Vauban) en cuyo interior está el centro antiguo de Mont Louis. Por la estación de Mont Louis-La Cabanasse (a un nivel bastante inferior a la zona de la fortaleza) circula y se detiene el llamado Petit Train Jaune (pequeño tren amarillo) que recorre toda la zona pirenaica desde la Tour de Carol (en la frontera con Puigcerdá, en la provincia de Gerona), hasta Villefranche de Conflent (a mitad de camino de Perpignan). Es decir, el tren une las comarcas de la Cerdanya y del Rosellón. Es una maravillosa atracción turística, con un recorrido de 62Km, pero discurriendo por paisajes de cuento de hadas, siguiendo el valle del río Têt. En verano, la composición incluye algún vagón descubierto, que el pasaje se pelea por ocupar. El trayecto completo toma tres horas, con paradas en muchos lugares del recorrido. Más asequible es el recorrido desde Font Romeu hasta Villefranche, en algo menos de una hora y media.Los viajeros que desciendan en Mont Louis, deben contar con unas empinadas pendientes para llegar al nivel de la fortaleza. De hecho me crucé con un grupo de la tercera edad, que echaban el bofe intentando llegar al centro antiguo subiendo de la estación.Desde Mont Louis hacia Puigcerdá hay dos carreteras (que no recorrí esta vez) que bordean (al Norte o al Sur) el enclave español de Llivia. La del Norte (D618) discurre por Font Romeu-Odeillo-Via, mientras que la del Sur (N116) cruza Saillagouse, hasta llegar a Bourg-Madame, en la misma frontera (inexistente gracias a Schengen).
El trazado del Petit Train Jaune sigue el valle del Têt,
como la propia carretera, hacia Villefranche de Conflent
(JMBigas, Junio 2011)
Villefranche de Conflent
(JMBigas, Junio 2011)
Viñedos de Maury, al pie de las Corbières
(JMBigas, Junio 2011)