El secreto para unas navidades sin estrés

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Cada regalo de un amigo es un deseo para tu felicidad – Richard Bach (Autor de Juan Salvador Gaviota)

Adelántate a las navidades

Quizá hayas detectado ya los primeros síntomas de que se acercan las navidades. Independientemente de nuestras preferencias por estas fechas (a mi personalmente me gustan), lo que no podremos evitar (salvo que huyamos a un paraíso tropical, que no es mala opción tampoco) es vernos atrapados por algunos de los compromisos habituales: cenas, comidas, regalos… A medida que uno se va haciendo mayor, estas fechas que se aproximan y por muchos motivos, casi se van convirtiendo en una carga. Pero con un poco de planificación previa es posible pasar unas navidades sin estrés.

Creo que uno de los aspectos más estresantes de estas fiestas es la sensación de que nos pilla el toro en todo. Compramos los regalos el último día, hacemos el menú de nochebuena con un par de días de antelación o decidimos a qué fiesta ir un día antes.

Te propongo que dediques una hora este fin de semana a planificar todo esto. Pero ¿qué podemos planificar?

Comidas y cenas

Si has tenido la suerte de organizar una cena o comida de navidad, dedica un tiempo a pensar el menú. No solo te ahorarás dinero comprando con antelación los ingredientes, sino que además, quitarás de tu, ya  de por sí abarrotada cabeza, un problema más. Por supuesto, una alternativa interesante sin te quieres complicar 0% la vida es recurrir a un servicio de cátering. Yo no lo he hecho nunca y agradecería conocer vuestras experiencias si lo habéis hecho. Quizá por menos de lo que se imagina (teniendo en cuenta tiempos de compras y preparación de alimentos) y poniendo entre todos dinero, podamos tener una cena distinta y quitarnos de encima una preocupación.

Lista de Regalos

A todos nos gusta recibir regalos, pero otra cosa es hacerlos. Sí, hacerlos también puede ser divertido, pero no cuando tienes que hacerlo a última hora, y no sabes qué regalar. Solo necesitas 20 min de concentración este fin de semana, para hacer una lista de las personas a las que tienes que regalar y qué puedes regalar a cada una. Además, haciendo esta lista, es posible que te surgan regalos “compatibles”. Por ejemplo, alguien puede querer un libro y un cd, y otra persona un libro y una serie en DVD. Puedes matar 4 pájaros de un tiro si, por ejemplo, haces un pedido conjunto en una tienda online (y ahorrarte los portes), o vas a comprarlos todos a la vez al mismo sitio. ¿Qué hacéis vosotros para que nos pille el toro con los regalos?

Otra ventaja añadida de la lista de regalos es que te permitirá controlar mucho mejor el gasto o ajustarte a un máximo de presupuesto. Si vas a por todo a ultima hora, es mucho más probable que acabes gastando más de lo que imaginas.

Fiestas.

Desde luego, dejar para el último momento a qué fiestas o celebraciones familiares vas a asistir puede resultar de lo más problemático. Si vives en pareja, es fundamental, que cada uno exponga claramente qué quiere hacer y por qué. No hay que tener miedo a decir las cosas claras. Se puede discutir con la pareja y que merezca la pena. Es mucho más grave que por “quedar bien” con la familia o amigos, pasemos una velada desagradable. Pero también puede ser válido lo contrario, que a nuestra pareja le haga ilusión que estemos a su lado con su familia o amigos. De nuevo, dejar estas decisiones para el último momento no hace más que empeorar las cosas. Si ya tenemos claro dónde vamos a ir, con el tiempo suficiente, evitaremos broncas innecesarias (e injustas) de última hora.

Extras.

Ahora que te has podido sentar para planificar todo esto, dedica un tiempo a pensar en algo distinto que te gustaría hacer estas fiestas. Algo que no hayas hecho nunca, pero que sea realizable. Que dependa solo de ti y de los tuyos. Por ejemplo, ir al monte a pasear en año nuevo, o correr la San Silvestre (aunque sea andando) o visitar algún pueblo para ver cómo se viven las fiestas allí o visitar a un amigo. Piensa en algo que te hiciera ilusión hacer e añádelo a tu lista. Piensa en algo que te pudiera hacer recordar estas fechas de forma distinta a todas las anteriores.

Por último me gustaría dejar un mensaje de ánimo a todos los que estas navidades vamos a echar en falta a algún ser querido. Es precioso recordar lo bien que pasábamos las fiestas en su compañía, lo que nos hacían reir, lo rico que estaba su cordero, o cualquier otro detalle que nos devuelva su memoria, pero no seríamos justos si solo nos quedármos con la tristeza de su recuerdo. ¿Recuerdas cuando eras niño? ¿No te hacía ilusión esta época? ¿No te hacía ilusión ver a los mayores felices? Independientemente del motivo, compartir unas mismas sensaciones con un montón de personas es algo muy especial y cada año habrá más “locos bajitos” ilusionados, a los que les hará una ilusión tremenda todo. Compartamos su alegría.

¿Qué otras ideas se os ocurren para pasar unas navidades sin estrés?

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