Puro hard boiled
La aparición de unos restos humanos en el fondo del río Clyde, presuntamente atribuidos a Joe Strachan, el más famoso atracador de Glasgow en el período de entreguerras, dispara el interés por saber si el cadáver encontrado es realmente el del gánster. Lennox es contratado por dos de las hijas del finado, para tener noticias fidedignas sobre el caso, y de paso aclarar cómo es que durante años han recibido grandes sumas de dinero. Los Tres Reyes, los jefes del hampa de Glasgow también tienen interés en aclarar la situación, y hasta la policía se pone en contacto con Lennox para pedirle ayuda. Y por si tuviera poco trabajo, nuestro héroe es contratado para resolver un sórdido chantaje, en el que está involucrado un famoso actor de Hollywood y un miembro de la nobleza. Las pesquisas que inicia le enfrentarán a un personaje casi mítico en el mundo del crimen, y notará que a medida que avanza en sus pesquisas, su vida se va poniendo más y más en peligro. Novela con todos los elementos del gran hard boiled, —grandes dosis de violencia, mujeres despampanantes, tramas enrevesadas y unos secundarios impactantes—, y todo esto con un toque chandleriano en su personaje, hombre lleno de contradicciones, un héroe con lados muy oscuros, pero brillante e ingenioso, a la vez que duro y sin contemplaciones. Novela llena de ritmo, con diálogos chispeantes, acción a borbotones, y una trama en la que se rinde homenaje al gran libro de Chandler, El largo adiós, por el uso magnífico de las múltiples personalidades. Y como quien no quiere la cosa, se nos hace un extraordinario documental de la vida en los años 50 en Glasgow, donde se nos habla del lugar, de sus gentes y sus criminales, con un paradójico sentimiento de atracción y repulsión por esa gran urbe y sus gentes, y sin hacer pesada ni aburrida la lectura, ni distraer de la trama detectivesca. En resumen, esta tercera entrega del canadiense Lennox resulta una magnífica y apasionante lectura.Roca, 2013
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José María Sánchez Pardo