Revista Cultura y Ocio

El Toboso (Toledo)

Por Yorga @javieramosantos

Al norte de Campo de Criptana, en plena ruta del Quijote, aparece El Toboso, en la provincia de Toledo, fundada por los iberos según demuestran los restos hallados en la zona. Tras la Reconquista, se sentó en ella la Orden de Santiago, de cuya presencia quedan algunos lienzos de la muralla. Resultó de gran importancia estratégica. Aunque este pequeño pueblo atildado, limpio, llano, de casas blancas y honrado paisaje, debe su popularidad a la imaginación del gran literato universal Miguel de Cervantes, que en su Don Quijote de la Mancha ubicó aquí la cuna de su amada imaginaria, Dulcinea.

Asegura el novelista romántico Walter Scott que el propio Napoléon indultó a El Toboso porque era la patria de Dulcinea. Benito Pérez Galdós lo consideró “uno de los lugares más evocadores del mundo Quijotesco”. Lo cierto es que El Toboso es uno de los mayores lugares con historia no solo de la Mancha, sino de toda España. De buena mañana, los cantos de los gallos reciben a un viajero ávido de nuevas experiencias, amante de la literatura y el buen yantar, que aquí encontrará. Da la impresión de que los gallos son los seres más despiertos de este pueblo, en el que el silencio lo corta, únicamente, el arrullo del agua.

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Monumento dedicado al Quijote y su amada Dulcinea en El Toboso.

Primera parada de la ruta por El Toboso: La iglesia de San Antonio Abad (siglo XV), de estilo ojival tardío, convertida en parroquial, da entrada al casco antiguo donde abundan los ejemplos de arquitectura popular manchega, de mampostería y muros encalados.

El convento de Trinitarias Recoletas (siglo XVII), declarado Bien de Interés Cultural, conserva dos torreones. La iglesia, barroca, y el claustro, herreriano, completan este conjunto. Por su parte, el convento de Franciscanas (siglo XVI), renacentista, conserva la portada de su iglesia. En las afueras, sobre un cerro, se ubica la ermita de Santa Ana, de estilo renacentista.

La casa de Dulcinea (siglo XVI) muestra una portada adintelada con cornisa y dos escudos. En el centro, ocupando el ancho de la portada, presenta un tercer nivel, a modo de torreón. El lugar recuerda a Dulcinea del Toboso, dama imaginaria o idealización de la aldeana doña Aldonza Lorenzo, a quien Don Quijote rinde su amor a la manera en que los caballeros andantes adornan a sus damas en los libros de caballerías. Su interior alberga un museo de útiles de valor etnológico y de uso cotidiano en la vida manchega.

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El Toboso no se entiende sin la influencia del ‘Quijote’./M.Peinado

Mientras, en el Centro Cervantino el viajero puede admirar una interesante colección de ediciones del Quijote en diferentes idiomas firmadas por presidentes de Gobierno y jefes de Estado. No faltan los signados por Mussolini o Franco, pero sí el que solicitaron de Hitler, que prefirió enviar un ejemplar autobiografiado del Cantar de los Nibelungos, la gran epopeya germánica. Tampoco Gadafi envió el Quijote y remitió El libro verde de la Revolución.

En su peculiar relación con el agua, El Toboso ofrece al viajero una ruta en la que disfrutar de la contemplación y la historia de los pozos coronados con bellos brocales de piedra labrada que hay diseminados por la localidad y alrededores, extramuros. Algunos de ellos son de origen celtíbero. O bien, al caer la noche, dejarse llevar en un itinerario nocturno por el embriagador silencio del pueblo u hospedarse en la casa de un noble, con el espíritu de Dulcinea como telón de fondo. Mejor es casi imposible.

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El Toboso es uno de los lugares con historia y encanto de la Mancha./M.Peinado

El Toboso está incluido en la manchega Ruta 25 escapadas para viajar con niños con las que los más pequeños de la casa podrán divertirse y gozar de experiencias extraordinarias en lugares turísticos con historia que a sus ojos resultarán mágicos. Y la visita no acaba aquí. Desde el corazón de Dulcinea, el viajero puede también optar por escaparse hasta Alcázar de San Juan para ver sus molinos o, dentro de la propia Toledo, visitar Illescas (hermoso emplazamiento que inspiró a El Greco) o Consuegra y su castillo.

Dónde dormir: Dulcinea; Ctra. Quintanar, 3; 45820 El Toboso (Toledo); teléfono: 925568055.

Dónde comer: Restaurante La Noria de Dulcinea; Calle de Don Quijote, 3; El Toboso; teléfono: 925568192.

Plano El Toboso


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