"El viaje de Ofantito" de Hans Freudenthal y continuación de su hijo Matias Freudenthal

Ofantito es un pequeño elefante que va a hacer un recado para su mamá, pero se entretiene por el camino cuando conoce a la vieja serpiente de los Bomberos. Sus travesuras le llevan a hacer un viaje en busca de la jirafa Miss Grúa, junto con un grupo de amigos que irá conociendo en sus peripecias: un león-policía, un búho-tendero, un pato que se dedica a cantar rimas raras... Y, por supuesto, en este mundo fantasma no faltan magos, duendes, flautas mágicas y todo tipo de brujerías.
Pero... ¿te imaginas un cuento contado solo hasta la mitad? Eso es lo que le pasó al pequeño Matías cuando su padre Hans llegó un día y con pena le dijo: "hoy no hay cuento, mañana tampoco".
Era el año 1943 y su país estaba en guerra, la familia pasaba hambre y frío. Hans había perdido su trabajo y estaba todo el día en casa. Escribía durante el día y por la noche les leía a Matías y a sus hermanos las aventuras de Ofantito. Matías nunca supo por qué el cuento quedó sin acabar. Pasaron los años y Matías seguía soñando con el pequeño elefante sin saber cómo habían terminado sus peripecias y si había logrado volver a casa con su mami. No conseguía encontrar un final por sí mismo hasta que, un día, decidió ponerse a escribir. Dejó volar su imaginación e inventó el final, como tú puedes hacer ahora. ¿Quieres hacerlo? O también, puedes abrir el libro y conocer el suyo..."
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Encuadernación: Tapa blanda / Ebook

Sobre el autor: Hans Freudenthal

Impresiones

Una historia diferente, y peculiar en su forma de narración. Me ha parecido muy emotivo que el hijo del autor quisiera continuar la historia años después.

Ofantito como bien dice la sinopsis es un elefante pequeñito que un día se entretiene en el lugar equivocado, desobedeciendo a su mamá. En este caso no esperemos sacar ninguna moraleja, o pensemos que va a ser castigado por ello. A partir de ahí se verá envuelto en un viaje un tanto extraño, conociendo a unos compañeros un poco peculiares. Al principio la historia descoloca un poco, parece extraña y sin ningún sentido, poco a poco va cogiendo forma.

No es un libro para primeros lectores, no ya por la extensión, tal vez por aspectos como el que comentaba anteriormente. Obviamente niños más mayores lo seguirán bien.

Tiene cuatro capítulos pero el último es que más especial me ha parecido. En primer lugar es el hijo de Hans quien escribe dirigiéndose con una nota al lector, invitándole a que continúe el cuento o bien que lea lo que él ha escrito. Además es cuando cuenta los motivos por lo que le llevaron a continuarlo. La forma de narrar es más clara y concisa, y sigue en el cuento haciendo hincapié en el lector que de esta forma se siente más partícipe en la historia.

Tiene abundantes diálogos y casi todos los personajes son animales, por lo que a los niños les atraerá bastante.

Hay una cosa que sí me ha chocado. No sé si en Alemania el carné por puntos será algo que lleve mucho tiempo implantado, o bien será cosa de la traducción. Pero hablan de que a un mago le han retirado el carné de conducir escobas porque le han quitado todos los puntos. Y no sé si en el 43 ya existía está modalidad allí.

Pocas ilustraciones pero muy cuidadas realizadas de la mano de Julia Santa Olalla.