En profundidad: Betty Anne Waters

FICHA TÉCNICA:

Director: Tony Goldwyn

Guión: Pamela Gray

Producción: Andrew Sugerman, Andrew Karsch

Dirección de fotografía: Adriano Goldman

Montaje: Jay Cassidy ACE

Diseño de producción: Mark Ricker

Vestuario: Wendy Chuck

FICHA ARTÍSTICA:

Betty Anne Waters: Hilary Swank

Kenny Waters: Sam Rockwell

Abra: Minnie Driver

Barry Scheck: Peter Gallagher

Nancy Taylor: Melissa Leo

Roseanne Perry: Juliette Lewis

Argumento:

Basada en un caso real, Betty Anne Waters nos enseña el tesón de una mujer que empleará 18 años de su vida para intentar sacar de la cárcel a su hermano, a quien cree que acusaron injustamente. Betty Anne pondrá en peligro su forma de vida y hasta la relación con su propia familia para conseguir su objetivo. No dudará en licenciarse en derecho y enfrentarse a una decisión equivocada cuyo error nadie está dispuesto a reconocer.

Kenneth Waters es, en cierto modo, un hombre conflictivo y el hecho de acabar de ser padre no parece terminar de alejarse de ese comportamiento. Cuando una mujer aparece muerta en su casa, la agente Nancy Taylor acude inmediatamente en busca de Kenny. No duda en culparle pero es puesto en libertad por falta de pruebas. Para Betty Anne y para el propio Kenny no hay duda de que se trata de una caza de brujas, pero un par de años más tarde Kenny es detenido por segunda vez acusado en esta ocasión de homicidio. La declaración de su esposa y su amante así como las pruebas aportadas llevarán al jurado a declararle culpable de lo sucedido y lo condenarán a cadena perpetua.

Betty Anne comienza a trabajar en busca de soluciones para demostrar la inocencia de su hermano. El caso le absorbe prácticamente todo el tiempo disponible y su familia se siente apartada. la infancia de Betty Anne no fue fácil pues su madre nunca actuó como tal y sólo el nexo especial que le unía a su hermano consiguió que saliera adelante. Ambos pasaron por numerosas casa de acogida y Kenny llegó incluso al reformatorio. Aunque no quería ser una mala madre, como fue la suya, temía no estar ahí cuando los suyos la necesitaran. La decisión de comenzar a estudiar derecho fue la gota que colmó el vaso y el matrimonio se rompió, pero Betty Anne seguía inmersa en Kenny y sus hijos comenzaban a pagar las consecuencias. Aquello que tanto temía parecía hacerse realidad por momentos.

Betty Anne conoce a Abra en la universidad y juntas llevarán el caso tan lejos como sea posible con tal de conseguir la libertad de Kenny. No hay límites racionales para la seguridad que Betty Anne tiene de la inocencia de su hermano y junto a Abra hará más de aquello que sea posible para demostrarlo. Nancy Taylor siempre tuvo a Kenny en su punto de mira, lo cual resulta sospechoso, y con los avances científicos y tecnológicos que está promocionando Barry Scheck en cuanto al análisis de ADN quizá logren reabrir el caso si consiguen las suficientes pruebas para ello.

Betty Anne Waters te engancha desde el primer momento, te seduce lo real de su historia y la fuerza con que los protagonistas se aferran el uno al otro. Los personajes no te dejan indiferente y la actuación es tan elocuente que incluso la propia Betty Anne dijo verse a sí misma al observar la interpretación de Hilary Swank. Sus 107 minutos de duración pueden parecer exagerados pero pasan uno tras otro con una carga emotiva tan grande que te hace formar parte de la trama. Una historia inspiradora, sin duda digna de ser conocida, e impecablemente puesta en escena.