Revista Cultura y Ocio

En un patio de París de Pierre Salvadori

Por Miss_cultura @miss_cultura
En un patio de París de Pierre Salvadori
Antoine, de cuarenta y pico años, es músico. De pronto, decide poner fin a su carrera. Después de ir de un lado a otro durante unos días, acaba encontrando un trabajo de portero. Mathilde vive en el viejo edificio de la zona este de París donde trabaja Antoine. Es una prejubilada, generosa e implicada, que divide su tiempo entre los servicios sociales y la comunidad de propietarios. Una tarde, descubre una preocupante grieta en la pared del salón. Poco a poco, su preocupación se torna pánico: ¿y si el edificio se derrumba? A medida que pasan los días, un sentimiento protector crece dentro de Antoine, que teme ver a Mathilde deslizarse hacia la locura. Entre patinazos e inquietudes, los dos formarán un dúo torpe, divertido y solidario que quizá les ayude a atravesar un mal momento.
-ESTRENO 22 DE AGOSTO- 




En un patio de París o alrededor de uno, el director Pierre Salvadori sitúa esta comedía con tintes dramáticos.
El director ha sabido como en un lugar como es un patio, lleno de personas diferentes, con manías, con inquietudes,con miedos e ilusiones dar vida y crear otra figura como la es la de un portero (Antoine) en un edificio algo peculiar. 
Antoine,no es un portero cualquiera,Antoine será un personaje entrañable,tímido y bonachón que, roba incluso él protagonismo a la misma Mathilde (Catherine Deneuve).
El director ha hecho un muy buen trabajo dando forma y vida a los vecinos.
Sin efectos especiales, sin dosis de tiros y grandes ostentosidades Pierre Salvadori, da una lección al espectador y a los cineastas de que, con un lugar encantador y unos personajes muy bien trabajados, se puede hacer buen cine.
No deja indiferente a nadie, no es de esas producciones que sales igual que entras, te hace pensar, te hace reír y llorar.
No se hace en ningún momento pesada y es que abarca tantos temas que el director va abriendo que no sabes como acabará ni que pasará a continuación, no es de esas películas predecibles.
En un patio de París puede pasar de todo, desde las cosas más absurdas hasta las más asombrosas pasando por hasta lo más esperpéntico, pero también puede pasar que os queráis quedar a vivir con sus vecinos y con Antoine.


-agradecimientos a la distribuidora

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