Revista Cultura y Ocio

Enrique Symns recita

Publicado el 18 septiembre 2010 por Poli @FIPoli27
Desde que lo leí, allá, por los tempranos '80, en El Porteño y luego en la Pan Caliente y luego en Cerdos y Peces y luego en las diversas recopilaciones de artículos que publicó bajo los nombres de Invitación al abismo o La vida es un bar y más acá en sus crónicas del diario Crítica y en sus relatos autobiográficos de El señor de los venenos y Big Bad City y En busca del asesino, no dejó de estremecerme, inquietarme, sorprender. 
A veces, también, me indignaba con su apología a la droga, su exaltación del estupro o algo peor, la pedofilia, su extrema posición contraria a todas las instituciones, incluida la familia, y su crudeza con la existencia. 
Sin embargo, me tentaba con su invitación a la aventura permanente, al abrirse al mundo de los sentidos, a los territorios que nos están vedados en la vida de oficina que llevamos. Tal vez, pensar en esa posibilidad, al igual que el suicidio para Cioran, es lo que nos permite continuar soportando la rutina. 
El desdentado Symns, el viejo choto que no tiene donde caerse muerto, que apenas alcanza a vivir en pensiones cutres, es un marginal, un loco, un extraño tipo de principios en este mundo de hipócritas. 
Siempre me llamo la atención el uso del lenguaje que posee, esa posibilidad de combinar las palabras de modo tan particular que lo convierte en poeta.
Symns nos habla de pesadillas y complots, de náufragos y sobreviviente, de guerras y jardines, de sirenas y flores, de Nietszche y Henry Miller, de vagabundos y perseguidos, de Bukowsky y Robert de Niro, de bares y cocaina, de suicidas y asesinos, de tristezas y celdas, de Borges y el dolor, de calles y de patrias, del origen y la muerte. 
Por eso, escúchenlo y busquen sus libros y leánlo. Es mucha más literatura que tanta mierda experimental que recomiendan leer muchos suplementos y que, cuando lo hacemos, solo nos produce bostezos.
Blog del autor del libro de cuentos "Historias fugaces de hombres y mujeres".

Volver a la Portada de Logo Paperblog