Llegó una de las épocas más esperadas del año (para los amantes de la cocina) la temporada del tomate. La verdad que sigo sin entender como se pueden llegar a tomar ensaladas con esos tomates de corcho sin sabor ni textura que venden durante todo el año.
Ahora podemos encontrar una gran cantidad de variedades, sin ir más lejos los mejores (en mi opinión) son los tomate rosa o los buey. La cosa que los buey son tan grandes que a veces tenemos tomates de casi un kilo y si queremos una ensalada para nosotros solos es un rollo tomarse un trozo de tomate y dejar para otro día la otra mitad. Los rosa para esto son perfectos.
Como veis en la foto el tomate es muy carnoso, en ningún momento vamos a encontrar esos tomate cutres llenos de agua y sin carne. Los pepinos de esta ensalada son de mi huerto
Estoy totalmente orgulloso porque estaban riquísimos y no tiene nada que ver con los de cualquier gran superficie, los tomates los compré en una tienda ecológica pero en un par de semana ya tengo los míos jejeje.
1.- Tan sencillo como pelar el tomate (a mi me gusta pelarlo) el pepino y los langostinos. Partirlos y mezclarlos junto con el bacalao. Se aliña con aceite y vinagre y salpimentamos. Podemos aderezar un poco con cominos.
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