Revista Opinión

Enseñanza

Publicado el 27 marzo 2015 por Javier Marcos Angulo @clamorsegovia
EnseñanzaAhora que se han celebrado las elecciones andaluzas, los partidos tendrán que aprender a pactar. Pero si no les han enseñado desde pequeños (educando), difícilmente lo sabrán hacer.Es como cuando empiezan a discutir y se pisan las palabras unos a otros. No han sido educados desde pequeños.Todos usan la soberbia como arma indispensable para conseguir lo que quieren. Se olvidan de algo fundamental en la vida en general y en la política en particular, la educación. Pero la educación se hace desde niños.Todo el mundo pacta con todo el mundo, empezando por la vida misma que te arrojó desde el vientre de la madre que te dio a luz. Ese es el primer pacto que sin tú saberlo haces, es el primer pacto de convivencia.Después vienen otros pactos, cuando aprendes a andar, cuando aprendes a  hablar, cuando (y esto es muy importante) aprendes a escuchar; luego llegan más pactos, cuando aprendes a sentir los errores que son aprendizajes prioritarios, para enseñar a otros para no cometerlos.Después pactas con tus amigos que van apareciendo en tu vida y entonces te das cuenta que algunos de esos amigos se han convertido en familia y te van enseñando cómo sortear las cosas, procurando no hacer daños colaterales.Pero en donde más aprendemos es en la escuela cuando somos pequeños y por supuesto en las enseñanzas que tus progenitores te han inculcado día a día.También aprendemos a saber discutir, escuchando al otro y procurando no interrumpir. Es difícil, ya lo sé, pero no es imposible. Siempre se saca alguna buena experiencia para ser mejor con tus semejantes.Pactamos durante toda nuestra vida; nos enseñan y enseñamos para llegar a madurar nuestras conciencias, para que en definitiva hacer más felices a los demás.Somos a veces tan soberbios que no queremos darnos cuenta que, precisamente con la soberbia, no podemos pactar nada, absolutamente nada.Por eso digo que para poder pactar, antes has tenido que pactar con tu 'yo', que es con el primero que hay que pactar. Porque pactar no es rebajarse ante el otro, es ser más inteligente que esa soberbia que quiere imponerse.
Es cuestión de una buena enseñanza.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas