Entrevistas con la Historia: Donald Trump, de magnate a presidente

Uno de los momentos más tensos durante la entrevista con Trump,
al final nos tuvimos que quitar el sombrero

Ha sido nombrado recientemente Presidente de uno de los países más poderosos de la Tierra. Un magnate va a regir los destinos de una nación, nunca ningún otro presidente norteamericano había suscitado tanta polémica.
Algunos advierten que sus decisiones pueden provocar un auténtico cataclismo, otros que no deja de ser más de lo mismo… pero esta vez envuelto en papel de estraza. Así le hemos visto nosotros.
¿Por su nombre, Donald, se ha sentido alguna vez identificado con el famoso personaje de Disney: “El Pato Donald”?.
Me he sentido identificado con el color de su plumaje – aunque no con su pluma–, sus ataques de ira y su obsceno lenguaje cuando esto ocurre, pero me siento más identificado con “El Tio Gilito”… también es blanco, es mayor y sobre todo es inmensamente rico.
Le han acusado de populista, de fascista, de misógino, demagogo, machista, xenófobo, homófono, conservador, ultranacionalista, racista, ricachón, chulo y de teñirse el pelo. No se han ahorrado epítetos contra su persona. ¿Qué hay de cierto en este tipo de acusaciones?.
Me pueden acusar de todo eso y más… pero nunca me podrán acusar de comunista. No ser “eso”, disculpa todo lo demás.

¿Pero su acercamiento a Putin…?.
Putin es blanco, rubio, ojos azules y lo único que tiene de “rojo” son algunas de sus corbatas. Me preocupan más los chinos, ojos oblicuos y tez amarilla. Su crecimiento económico y demográfico es imparable, sino se frena en el 2025 van a liderar el mundo. Aunque pueda resultar una paradoja, el que ya no sean “rojos” me preocupa en extremo. Han abrazado el capitalismo y la economía de mercado con un exceso de entusiasmo. Putin está tan preocupado como yo, en esto coincidimos… ni a él ni a mí nos gustan los “ménage à trois”.
Los japoneses también tienen los ojos oblicuos…
A los “japos” les dimos un buen repaso hace unas cuantas décadas. Desde entonces aceptaron nuestros principios económicos, nuestras ideas políticas y abrieron su mercado. Son numerosos, pero no en exceso, y se encuentran encerrados en un archipiélago que no permite muchas alegrías. Además son enemigos tradicionales de los chinos, resumiendo son nuestros aliados.
Sus primeros días como Presidente y su decreto migratorio a lanzado a la calle a millares de americanos indignados.
Ustedes ya conocen de primera mano el fenómeno de los “indignados”, ocupan el espacio público y lo ensucian, se enrabietan, chillan y patalean. Hay que soportales una temporada, pero al final les das un partido, vuelven a sus casas y se relajan. Prometo tener paciencia.
Los fiscales de algunos estados y diferentes personalidades tampoco se muestran muy entusiasmados.
Nada que no se pueda resolver con una dimisión fulminante para unos y un “tuit” ofensivo para los otros.
A propósito de Twitter, maneja los “tuit” con mucha soltura ofensiva y defensiva. ¿Considera Twitter un arma?.
¡Por supuesto!, con ella apunto, disparo y mato. Nadie me va a llevar a los tribunales por un “tuit” ofensivo, esto no es España y además soy el Presidente. Me gusta la aplicación para hacer llegar a los ciudadanos mis ideas más profundas, resumidas en 140 caracteres. A mi me obliga a ser conciso y a ellos les ahorra una lectura larga y farragosa de mis ideas políticas.
Hablemos del Muro. ¿De que lado quedan los bárbaros?.
Menos coña, los chinos levantaron durante siglos la Muralla China y hoy día es una de las Maravillas del Mundo. Ellos velaban por su seguridad y nosotros también. Con el muro ni entran ni sales… no necesitamos de nadie. Peña Nieto se niega reiteradamente a costear el muro, incluso a pagar la “medianería” correspondiente. Como vecinos prefiero a los canadienses, no es nada personal y lo digo sin acritud.
El Muro de Berlín no era precisamente una de la Maravillas del Mundo.
Exactamente, simplemente no fue construido en el momento y lugar adecuado. El de México si lo va a ser.
Resumiendo, “América para los americanos”.
Esa es, sin reservas, mi filosofía.
“Sin reservas”… ¿Las van a eliminar también?.
Sin bromas, dejemos a los indios en paz, hacen tiempo que dejaron de molestar.
Una de las claves de su campaña ha sido prometer erradicar el terrorismo islámico de la faz de la Tierra.
En eso voy a ser muy radical, nada de “Alianza de Civilizaciones” como propuso su anterior Presidente. A mi me gusta más el “Choque de Civilizaciones” que argumentó Huntington. En esto vamos a por todas, cada siglo los americanos tenemos un reto. El pasado siglo eran los “comunistas”, hicimos tablas en Corea y perdimos en Vietnam. En el presente siglo nos tocan los “islamistas”, en Irak y Afganistán nos estamos cubriendo de gloria.
Hay quien aduce intereses geoestratégicos y económicos de diversa índole, sobre todo en los recursos petrolíferos de estas regiones.
Cosas interesantes tienen, eso es indudable, pero muy mal llevadas. Nuestra tarea es democratizarles, que gestionen mejor su economía, abandonen el terrorismo y carezcan de armas de destrucción masiva. Básicamente, hacemos una labor humanitaria.
En Irak nunca existieron las armas de destrucción masiva, curiosamente Corea del Norte se enorgullece de tenerlas e incluso de vez en cuando las prueba.
No es comparable, en primer lugar Corea del Norte hace frontera con China y en segundo lugar no dispone de riquezas dignas de mención. Por nuestra parte pueden seguir con sus pruebas, su comunismo y su violación de los Derechos Humanos… no vamos a inmiscuirnos en su soberanía.
¡Que falta de empatía!.
Asombroso pero cierto, empatizamos más con los iraquíes y afganos que con los coreanos, por eso queremos ayudar a los primeros y olvidarnos de los últimos… que se ocupen los chinos.
Para terminar, hablemos del Calentamiento Global.
Hay poco que hablar, es un “cuento chino”. Debo recordarle que en su país Aznar y el primo de Rajoy ya negaron el Calentamiento. Si va haber Calentamiento Global… va a ser a raíz de mi nombramiento como Presidente (risas).
Terminamos la entrevista mientras Trump no parar de reír, de tuitear y de comentar que él es el Calentamiento Global. La risa hace que se agite su flequillo… y con él sus ideas.