Escapada familiar al Pirineo Aragonés: Jaca, Biescas y La Cuniacha

Este fin de semana he estado ausente por una buena causa: una escapada familiar. Que bien sientan estos viajes juntos, y lo que disfrutamos con el peque allá donde vamos.

En principio este viaje era un regalo de mis padres para pasar una noche en Jaca y relajarnos en un spa, una escapada romántica que decidimos convertir en una escapada familiar. Nos parece muy importante pasar momentos en pareja, pero en esta ocasión no veíamos necesario irnos lejos para estar juntos cuando podemos hacerlo estando aquí; en cambio nos apetecía mucho disfrutar de una nueva aventura con Álvaro, y como todo lo que programamos en familia, no ha defraudado :-)

El sábado pasamos el día en Jaca, ciudad que nos gusta mucho, cercana a cualquier sitio del Pirineo, ideal para todo tipo de excursiones de día, y perfecta para perderte en ella por la tarde-noche, en esas calles tan bonitas del centro llenas de bares donde poder tapear y pasar una velada perfecta. Nos alojamos en el Hotel Reina Felicia y la verdad que estuvo muy bien, situado en una zona residencial muy tranquila, con servicio de comida bastante bueno y desayuno buffet que también estaba muy bien, habitaciones grandes y una cama king size de 2×2 que nos permitió dormir a los 3 juntitos de maravilla.

Por la tarde disfrutamos del circuito de spa (creo que estas cosas tenían que estar obligadas bajo prescripción médica mínimo una vez al mes) con jacuzzi, sauna, baños de vapor, diferentes tipos de duchas…Como los niños no pueden acceder a la zona de spa nos fuimos turnando y mientras uno se relajaba el otro estaba jugando con el peque en la piscina climatizada.

El domingo amaneció como si nos encontráramos en el mes de julio, y ante un día así no pudimos evitar comenzar a pensar en excursiones improvisadas hasta que nos decidimos por visitar La Cuniacha. La verdad que fue un acierto; yo había estado con mis padres hacía tiempo, pero no lo disfruté ni la mitad, pues es curioso como ves con unos ojos totalmente diferentes las cosas cuando las disfrutas con los niños.

Para los que no lo conocéis, explicaros que es un parque faunístico situado en Piedrafita de Jaca (al lado de Biescas). Su visita permite adentrarte en el bosque y a la vez poder conocer algunas especies que habitan en él como los ciervos, renos, gamos, linces, bisontes, osos pardos, sarrios, lobos…y hasta 20 especies diferentes. El lugar tiene un encanto especial pues es prácticamente salvaje, sólo hay unas pequeñas vallas que separan a los animales de los visitantes (en el caso de animales más peligrosos como los osos, linces, lobos…la seguridad es mucho más grande), permite adentrarte en el bosque, contar historias a los niños (como que ese es el bosque de los cuentos, y que en él viven todos los personajes que en ellos aparecen), narrar fábulas sobre los árboles o las plantas del lugar…Además de poder admirar lo bonito que es el paisaje y a la vez inculcar a los niños la importancia de valores como el respeto por la naturaleza y por los animales, y el respeto por su hábitat, pues allí nosotros somos unos meros invitados.

Es tanta la cercanía que hay con los animales que en uno de los recorridos tuvimos que dar media vuelta pues las cabras montesas habían dejado de pastar y se habían posicionado en medio del camino de paso, no nos miraban con cara de muchos amigos así que decidimos que era mejor esperar y volver cuando ya estuvieran de nuevo ajenos al paso de los visitantes. Creo que solos hubiéramos probado, pero con el niño mejor no arriesgar, que se pone a gritar justo en ese momento y hubiéramos tenido que correr como si no hubiera un mañana, pues vistas de cerca os aseguro que son mucho más grandes de lo que parecen y la verdad que imponían y mucho.

Me parece una excursión perfecta para niños a partir de los 2 años y medio aproximadamente. A tener en cuenta que hay cuestas con bastante desnivel en ciertos momentos, así que hay que tirar de brazos o mochila (en la recepción alquilan mochilas de montaña hasta 20 kilos por 6 euros). Con niños mayores o en grupos de adultos creo que tiene que ser un lugar precioso para visitar en invierno cuando esté todo nevado (pues abre todos los días del año), allí alquilan también las raquetas de nieve.

El recorrido completo (con parada incluida) puede durar unas 3 horas aproximadamente. Hay posibilidad de entrar comida y tomarla en una de sus dos zonas de picnic, si no vais preparados en el bar que hay a mitad de recorrido disponen de bocadillos y algún aperitivo caliente por muy buen precio. En nuestro caso por 40 euros pudimos entrar los 2 adultos (Álvaro todavía no paga) con menú incluido (bebida de medio litro + bocadillo caliente + patatas fritas) para cada uno. Comparado con otros parques no me pareció demasiado caro.

Podéis encontrar toda la información del lugar en http://www.lacuniacha.com

Después de visitarlo podéis acercaros a cualquiera de los pueblos de alrededor, nosotros elegimos Biescas pues era la Feria de Otoño y aún llegamos a tiempo a un concierto de La Ronda de Boltaña y a ver algunos de los animales que allí había.

Y después de este fin de semana tan fructífero tocaba volver a casa, que la semana comenzaba de nuevo…

Ahora sólo nos queda pensar en nuestra siguiente escapadita :-)