Especialista del Quirón Sagrado Corazón ve “claves” la hidratación, el descanso y la alimentación en la Feria

La Feria de Abril es una de las fiestas más importantes que se celebran en Sevilla y a la que los sevillanos y los visitantes más se entregan. Por eso, durante estos días es habitual que se alteren los horarios de comidas, se cometan excesos con las bebidas alcohólicas y se rompa el ritmo de vigilia y descanso, lo que afecta a los asistentes tras varios días de fiesta, con la aparición de signos de fatiga y cansancio.

“Normalmente, no damos importancia a estos avisos y continuamos con la diversión; sin embargo, tras varios días, podemos sentirnos afectados por circunstancias que deben evitarse, como los excesos de bebidas alcohólicas, los malos hábitos alimentarios, la falta de descanso, etcétera. A corto plazo, estos abusos pueden desembocar en trastornos como intoxicaciones etílicas y hepatitis alcohólicas, gastroenteritis agudas, gastritis y trastornos del sueño”, advierte en un comunicado el especialista en medicina interna de Quirón Sagrado Corazón Celso Pareja Obregón.

Así, en estas fechas se incrementa el número de visitas a las urgencias hospitalarias por patologías derivadas de estos excesos. “Sin embargo, y a pesar de algunos casos”, continúa el especialista, “los sevillanos siempre han dado muestras de saber divertirse de una forma sana y alegre, de beber con moderación y de disfrutar inteligentemente de la Feria de Abril”.

El doctor Pareja Obregón señala, además, una serie de consejos para el caso de que nos encontremos con una persona con intoxicación etílica. Así, indica que cuanto más joven sea la persona, sus efectos serán más graves y el riesgo de hipoglucemia o coma etílico se incrementa. Siempre que haya alteraciones del estado de la conciencia de la persona, se debe trasladar al afectado a un centro hospitalario.

Además, advierte de que nunca se debe provocar el vómito de una persona inconsciente, ya que existe el riesgo de ocasionar una aspiración de contenido gástrico en los pulmones. Se ha de avisar cuanto antes a los servicios médicos. Si el afectado está consciente y colabora, se le debe acostar o sentar en un sitio tranquilo, mantenerlo bien abrigado y hacerle ingerir líquidos azucarados y abundante agua.

Asimismo, apunta que es importante detectar los primeros síntomas de intoxicación etílica: desequilibrio, mareos, lengua pastosa, etcétera, para dejar inmediatamente de beber. Este debe ser el momento del famoso “caldo con yema” para reconfortar el estómago e ingerir luego un par de vasos de agua fresca.

HÁBITOS ALIMENTARIOS

Por otro lado, los trastornos derivados del desorden alimenticio y el exceso de bebidas alcohólicas pueden pasar factura a nuestra salud y a nuestro peso. Para evitar disgustos en la báscula y disfrutar de una buena Feria, Felipe del Valle, especialista en nutrición de Quirón Sagrado Corazón, nos ofrece un decálogo de recomendaciones (sobre todo a los más jóvenes) para hacer frente a cualquier trastorno derivado de las exageraciones de estos días.

De este modo, aconseja no ingerir bebidas alcohólicas con el estomago vacío; intercalar con relativa frecuencia agua fresca o algún refresco sin azúcar, para contrarrestar los efectos del alcohol; y realizar las cinco comidas principales del día (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena). Además, la dieta de estos días debe ser rica en hidratos de carbono (pan, cereales, legumbres, pastas y arroz) y frutas. Asimismo, el gazpacho es un excelente aliado por el aporte vitamínico y de minerales de su composición.

También recomienda mantener una buena hidratación, ya que el alcohol se metaboliza en el hígado y este proceso consume agua y glucosa de la sangre. Así, es importante beber entre 2-3 litros de agua al día para compensar las pérdidas derivadas del aumento de la actividad física y para una mejor metabolización del alcohol. Un método muy útil es alternar las bebidas alcohólicas con aquellas sin alcohol, preferiblemente agua, ya que esta acelera la eliminación de alcohol del organismo.

Del mismo modo, hay que dormir entre siete y ocho horas todos los días; procurar no hacer mezclas de bebidas alcohólicas; y elegir alimentos como jamón serrano o pescados a la plancha, en lugar de los embutidos o el pescado frito. En los momentos en los que no se esté de Feria, es cuando debemos aprovechar para elegir alimentos especialmente ligeros, sobre todo verduras y frutas.

Un elemento clave de la Feria es el baile, sin duda una buena excusa para hacer algo de ejercicio estos días, pues aumenta el gasto calórico y  compensa el exceso de ingesta en estos días festivos.