Espíritus en Lima

Probablemente, la Casa Matusita sea la casa más embrujada del mundo y está en Lima, Perú.
¿Cómo puede caberle semejante título? Por la cantidad de sucesos inexplicables e historias tenebrosas que arrastra desde hace cientos (o miles) de años. En el centro mismo de la vieja capital, ese terreno fue nudo de la historia prehispánica ya que era una zona de adoración religiosa. Con semejante inicio, a lo largo de los años la casa quedó marcada a fuego por a los fenómenos paranormales que nadie duda en dar por ciertos.
En esa casa o muy cerca en la época hispana hubo murallas que dividían a la ciudad entre pobres y ricos, funcionó una cárcel, un centro de detención clandestino y hasta no hace mucho la siempre oscura embajada de EE.UU. Actualmente está ocupada por una entidad bancaria, pero su segundo piso, el embrujado, no registra ningún ocupante. ¿Cuales son los hechos que la convierten en una casa siniestra? Hay muchos, pero las teorías más fuertes son dos. Por un lado fue habitada por un aristócrata perverso que maltrataba cruelmente a sus sirvientes. Un día, durante una velada con distinguidos amigos, por venganza, para provocar una indigestión los sirvientes sirvieron una cena intoxicada con drogas alucinógenas y se retiraron a la cocina. Pero luego de escuchar ruidos al regresar encontraron a todos los comensales extrañamente asesinados. La otra es la que más nos gusta; narra la historia de un hombre de origen japonés que habría hallado a su mujer en la cama con otro sujeto y al ver la escena tomó un cuchillo y acabó con la vida de los amantes, para luego hacerse el famoso “Harakiri” asiático.
Espíritus en Lima es la canción que más nos gustó del primer disco de Shuca Mágica, banda Peruano/Argentina que inspiró este texto y practica un pop porteñisimo pero embebido por los jugos de la selva amazónica. Sean dos, tres, cuarenta, cien o mil, ningún fantasma peruano va a poder superar a ese romántico japonés errante, que será buena onda, pero ojo con aparecerte por esa casa con una amante.