Estupor y temblores de Amélie Nothomb

Estupor y temblores de Amèlie Nothomb
Editorial Anagrama ~ 9788433969194
Esta novela con declarada carga autobiográfica, que ha obtenido un impresionante éxito en Francia, cuenta la historia de una joven belga de 22 años, Amélie, que empieza a trabajar en Tokio en una de las mayores compañías mundiales, Yumimoto, quintaesencia de las empresas japonesas. Con "estupor y temblores": así es como el emperador del Sol Naciente exigía que sus súbditos se presentaran ante él. En el Japón actual, fuertemente jerarquizado (en el que cada superior, es antes que nada, el inferior de otro), Amélie, afligida por el doble handicap de ser a la vez occidental y mujer -extraviada en un hormiguero de burócratas, subyugada ademas por la muy japonesa belleza de sus superior directa, con la cual tiene unas relaciones de franca perversidad-, sufre una cascada de humillaciones. 
Mirar al vacío
Amélie es una constante en este blog. Desde que la conocí en 2010, me decidí a leerme todas sus obras de cuando en cuando. Este es mi quinto libro de esta adorable señorita, y es una de sus novelas más conocidas y celebradas, y me alegró mucho la vida encontrarlo en la biblioteca para poder leerlo con absoluta felicidad. Y así ha sido.
Para entrar en contexto hay que saber que Amélie nació en Japón, pero a los cinco años abandonó el país por el trabajo de su padre que era diplomático. Cuando tenia 21 años regresó al país de sus amores luego de tantos años, y nos cuenta una historia que está en el libro de Ni de Eva ni de Adán. Aprendió o más bien recordó y reforzó su dominio del japonés durante ese tiempo. 
En esta historia, estamos en enero de 1990. Amélie consigue un trabajo como intérprete de japonés para una gran compañía, la gran Yumimoto. En esta empresa, ella ingresa para que le asignen un empleo que tenga en cuenta sus talentos. Pero como ella tiene talento para conseguir enemigos, terminará haciendo oficios complicados, humillantes y por supuesto hilarantes. Su superior, la bella Mori Fubuki al principio es una aliada. Y en la cadena de los superiores, sobre todo el señor Omochi le harán la vida imposible. Sacar mil veces fotocopias, entregar cafés, actualizar calendarios y demás trabajos poco honorables. Todo esto, aderezado con el sentido del trabajo y el esfuerzo de los japoneses y por supuesto, la peculiar visión de Amélie.
Hay que decir que Amélie Nothomb es de mis escritoras favoritas y siempre es una delicia leer sus obras. Son cortas, esta tiene menos de 130 páginas y siempre estoy segura que me reencuentro con una escritora original y sobre todo con un humor que aprecio mucho. Una escritora que logra que me ría siempre o me sorprenda con la hilaridad que destila. En este caso tenemos a una muy joven versión de sí misma, donde cuenta su experiencia en el mercado laboral japonés. No sólo es su experiencia. Amélie sigue explicando desde su visión y su crianza japonesa, como ve desde su punto de vista la sociedad nipona y su forma de comportarse. Siempre es encantador ver su punto de vista de su adorado país.
La temática se centra en la vida laboral de Amélie, que desde el primer momento debe asumir trabajos que no creía que tendría que hacer. Y claro, esta mujer nunca se salva de meterse en líos. Pero en el libro la hilaridad está siempre presente. Tener que trabajar sin descanso en como vaca en el pasto de las facturas, entregar cafés, sacar fotocopias, copiar listas y demás trabajos que según su superiora, ella tiene el intelecto demasiado bajo para poder realizar con eficacia. Y no olvidemos su experiencia en el gremio higiénico.

En esta divertida y corta novela existe la descripción de los personajes que rodean el sufrido empleo de Amélie. Su bella pero perversa superiora, y el superior de ésta, quien es aún más perverso. Pero también hay buenas personas. Amélie hace una gran explicación del sistema jerárquico japonés y su filosofía del trabajo, siempre con ese humor que no abandona la escritura de la autora. Aderezado con los momentos de fantasía, donde ella está delirando con caer y aplastarse en el pavimento de Tokio mientras mira al infinito por el ventanal.
En resumidas cuentas,una divertida e hilarante obra autobiográfica de la autora, que es de sus obras más conocidas. Sin duda Amélie es una escritora única, muy distinta y que es una maravilla de leer y nunca te deja indiferente con sus historias. Hay que leerla vamos.