Expediente Matrimonial

A estas alturas de la vida todas y todos sabemos que casarnos es mucho más que firmar un papel pero por mucho que hayan cambiado las cosas la firma es necesaria. No hay boda sin firma. Puede ser antes, después o durante pero estará.

La burocracia y el papeleo no es un tema que nos apasione a muchos pero es cierto que cuando se trata de la boda hasta el viejo registro civil de tu ciudad te parece más bonito. Cuestión de actitud. El papeleo de la boda es uno de los temas más importantes y a la vez que más dudas genera entre los novios, en parte debido a que en este nuestro querido país no existe un proceso igual. El papeleo de la boda, conocido oficialmente como Expediente Matrimonial varía de unas provincias a otras e incluso de unas ciudades a otra pero nadie se ha muerto en el intento de formalizar todos los papeles necesarios así que no desesperes y pon tu mejor sonrisa a este proceso. Y lee este post hasta el final que voy a intentar orientarte un poco basándome en mi propia experiencia, vamos allá!

En el caso del papeleo bodil, si habéis decidido casaros por la iglesia es todo un poquitin más fácil. Normalmente, y digo normalmente, en este caso deberás acudir a la Iglesia elegida unos meses antes a abrir el expediente. ¿Qué deberás llevar? Fe de bautismo, partida de nacimiento y vuestros DNI. Allí, tu pareja, dos testigos que en ocasiones no tienen que ser familiares pero que podréis cambiar para la ceremonia y tú firmaréis los documentos. Y hasta aquí ha llegado tu experiencia con los papeles ya que a partir de este punto es la Iglesia la que se ocupa de todo.

Si en cambio habéis decidido casaros por lo civil deberéis dirigidos al Registro Civil de vuestra ciudad. Si os casáis en una localidad diferente a la que estáis empadronados igualmente debéis iniciar el procedimiento en vuestra ciudad y luego solicitar un traslado de expediente. Hay Registros Civiles que funcionan con cita previa aunque la mayoría no tienen este servicio así que hay que pegarse un madrugón e ir directamente a coger número. Madrugón importante sobre todo en las grandes ciudades donde los Registros Civiles suelen ser conocidos por sus amplías colas… En mi propio caso nos pegamos un madrugón, llegamos y en cinco minutos nuestros testigos estaban firmando y cinco minutos después todos salíamos por la puerta a pegarnos un gran desayuno. ¿Qué documentación hay que llevar en este caso? Vuestras partidas de nacimiento y DNI. Las partidas de nacimiento pueden solicitarse por Internet aquí y os las envían a casa directamente. Deberéis ir acompañados de dos testigos que según el Registro Civil pueden variar… En el de nuestra ciudad uno tenía que ser familiar y otro no y en el lugar donde nos casamos tenían que ser los dos no familiares.

Una de las preguntas más frecuentes y que ya hemos respondido arriba pero a la que quiero volver a hacer mención es la de…“¿Los testigos que firman este día son los que tienen que firmar en la ceremonia?” No. Estas personas serán los testigos de la apertura del expediente matrimonial y pueden ser las mismas o no que las que firmaran el día B. Otra de las preguntas del millón es… “¿con cuánta antelación deben iniciarse los trámites?” Ya se sabe que las cosas de palacio van despacio así que lo más recomendable es iniciarlos alrededor de 3 meses antes de la boda como mínimo para evitar imprevistos o que si los hay, se puedan solventar con tiempo y tranquilamente…. como el día que en el trabajo llamas al Registro Civil para hacer una pregunta y te dicen que han perdido la documentación y que tienes que volver a aportarla y sin pensártelo abandonas tu puesto de trabajo, llamas al futuro marido, despiertas a los testigos al grito de ¡¡Bajad ya con vuestros DNI’s!! y salís corriendo hacía el pueblito bueno donde habéis decidido casaros a entregar toda la documentación de nuevo.

En definitiva, que los papeles y su proceso no os asusten porque todo es mucho más fácil y llevadero de lo que parece en un primer momento. El objetivo final hace que hasta los folios llenos de palabras escritas en Times New Roman tengan encanto.