Experiencia Hospitality Club Munich

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Mi 2da Experiencia Hospitality Club – Munich:

En esta oportunidad mi anfitrión fue un Doctor con una inteligencia, amabilidad y apertura enorme con sus huéspedes.

Su hogar, una bella reliquia del tiempo con más de 100 años, en un bello campo, a 30 minutos del centro de Munich. Entrar a su morada, erizó mi piel y me trasladó a una estado de paz y encanto increíbles. Los pisos todos de ladrillos irregulares por el paso de aquellos que han estado en el lugar; las escaleras y puertas de madera, como si fuese una historia de reyes y castillos… ¡Ni siquiera faltaba la llave grande de hierro!

Después de llegar a Munich y tomar el tren desde Hauptbanhof, nos recogió en la estación de Freising, para llevarnos a su hogar, a un poco más de 15 minutos en un poblado lleno de campo.

El esfuerzo de mi gran anfitrión esa noche, fue sobrenatural. Se sentó, me explicó muy bien cómo y cuándo movilizarme a través de su región; qué visitar; e incluso, permitió que otra persona más nos acompañara esos días: una nueva amiga de Vancouver, con la quien compartiría mi estadía y el recorrido en aquella ciudad.

Ella estuvo allí, mucho antes que yo. Esta era su segunda visita, y ya la había hospedado. Así que se trataba de dos conocidos y un nuevo acompañante. Esa noche tuvimos una gran velada; ella con su té, yo con un pequeño bocado de comida rápida, y todos hablando de nuestras procedencias, viajes, realidades, y deseos por realizar.

Al día siguiente, tomamos nuestro desayuno bien temprano, gracias al cariño del doctor -porque no existe otra palabra para el mejor anfitrión-; y esperamos nuestro bus, tal como miles de pueblerinos alrededor del mundo, para forjar una jornada en la ocupada gran ciudad.

El transporte público en Europa, cumple un timing muy riguroso, por lo que les aconsejo, siempre revisen antes o durante su travesía, conocer las horas de cada medio que utilicen para trasladarse. Sus horarios y frecuencias cambian con el pasar de las horas y los días. En fines de semana – como es de suponerse- todos descansamos y las frecuencias son menores; así que tomen sus previsiones.

… Y como si fuese poco, la majestuosidad de esa ciudad, apenas empezaba a sorprenderme; pues no sabíamos muy bien qué ticket comprar, que nos fuese útil para toda la jornada. Pero el conductor fue tan amable, que detuvo el bus y nos ofreció la mejor opción. Con esto, quiero seguirles recordando que no hay imposibles, y que un viaje todo puede llegar a sorprenderlos y cambiar de un momento a otro. Lo que menos esperan puede ocurrir. Tal como estos hechos.

Para información sobre las líneas de buses que conectan y conviven en Munich, les recomiendo visiten el siguiente link.

Sin duda alguna, muchas serían las sorpresas en esta ciudad, pero la menos esperada fue el contar con la Extra – Supra Amabilidad y preocupación sincera del Doctor en la atención de nosotros, sus huéspedes:

Un amanecer con sensación térmica bajo cero fue suficiente para que el doctor nos invitará a conocer las fronteras de la región de Baviera y al castillo en el cual se inspiró Walt Disney… el Inolvidable Neuschwanstein.

Ubicado cerca de Füssen, al fondo podrán apreciar el castillo de Neuschwanstein.

Por ello es que aliento a cada una de ustedes a c0nsiderar y participar de este sistema, acoge y juega a ser un huésped.

Para mayor información visitar Hospitalityclub.org.