¡Exponme!

Por Retroyconencanto @retroyconencant

Este expositor, no sabemos muy bien de qué objetos en su origen, nos vino como caído del cielo. No era precisamente el modelo que queríamos conseguir, más bien como el de la segunda foto... Pero a caballo regalado no le mires el diente. Sobre todo, después de tratar de obtener, sin éxito alguno, el susodicho de abajo. Para lo cual, acudimos en primer lugar, a nuestra tienda china habitual. -"Buenos días, Lin, ¿tendrías algún expositor que no te sirva o no quieras?"- "No tenel expositol, bonitas" (hay que aclarar que Lin siempre nos llama bonitas, a nosotras, y a todas las vecinas del barrio, con lo que te vas de allí como más animada, aunque, en nuestro caso, no lográramos el escaparate ambulante...). Y en segundo lugar, a Joaquín, el quiosquero de abajo que, ¡precisamente!, se deshizo hace poco de todos los que no quería... Al menos, le sacamos la promesa firme de no volver a tirar nada, sin consultarnos previamente. Pero mira tú por donde, al llegar al taller después de tan infructuosa búsqueda, hallamos encima de la mesa este modelo, que "alguien" encontró en un piso que estaban desalojando, ¡y que nos viene de perlas para colocar todas nuestras tablitas!
¡Exponme!