Fallo premio primavera 2017 - carme chaparro con no soy un monstruo

Hace un par de días, en el ámbito cultural de El Corte Inglés de Callao se ha hecho público el fallo del jurado para el Premio Primavera de este 2017. 

Es la vigésimo primera edición del premio y en esta ocasión la afortunada ha sido Carme Chaparro con su obra "No soy un monstruo" presentada al concurso bajo el pseudónimo de Paulina Murillo.
Este galardón está dotado con 100.000 euros y es uno de los más prestigiosos de la lengua española convocado por la editorial Espasa y por el Ámbito Cultural de El Corte Inglés sumando año tras año cada vez más participantes. En esta edición se han presentado 1.125 obras procedentes de 37 países encabezados por España con 538 novelas y concretamente la Comunidad de Madrid con 130.
En los últimos años este premio ha sido otorgado a novelas de diferente temática como "La noche soñada" de Maxim Huerta, "Misterioso asesinato en casa de Cervantes" de Juan Eslava Galán o el último premiado que fue Carlos Montero con "El desorden que dejas".
Esta vez la decisión del jurado (compuesto por Antonio Soler, Rammon Pernas, Fernando Rodríguez Lafuente y Ana Rosa Semprún y presidido por Carme Riera) ha sido unánime y sorprendidos como estaban por el nombre desconocido intentaron hacer averiguaciones de quién estaba detrás del pseudónimo deduciendo que tenía que ser alguien que conociera muy bien Barcelona y el mundo del periodismo. Sin embargo, aunque estas premisas se cumplen en Carme Chaparro, el jurado no fue capaz de llegar a ella hasta el momento de desvelar el misterio.
Os dejo con la sinopsis de la novela para poneos en contexto antes de hacer un resumen de los temas que salieron al comentar la novela con la autora.
"Solo lo perdió de vista un instante, apenas medio minuto, mientras respondía a un mensaje de WhatsApp. Y Kike desapareció. Nadie vio nada pese a que el centro comercial estaba lleno de clientes. Cuando la inspectora jefe Ana Arén y su equipo del Grupo de Menores se hicieron cargo de la investigación, no tardaron en darse cuenta de que todos los indicios apuntaban a un viejo conocido: Slenderman.

Slenderman -el hombre delgado, en alemán- fue el nombre con el que, hacia dos años, la prensa bautizó al misterioso secuestrador de Nicolás, un niño del que no se había vuelto a tener noticias; este suceso provocó una ola de pánico en Madrid y consumió horas y horas de televisión. Ahora parecía que el criminal había regresado: el mismo tipo de niño, de la  misma edad, físicamaente idéntico y desaparecido en el mismo lugar. Lo único que no cuadraba era que Slenderman llevaba casi veinticuatro meses sin actuar. ¿Habría mantenido a Nicolás con vida todo ese tiempo?.
Aquel fracaso aún perseguía a Ana Arén. También preocupaba a Inés Grau, reportera estrella del Canal Once y escritora de éxito, la especialista en información de sucesos que siguió el caso de Nicolás y a la que ahora habían asignado la desaparición de Kike. Ambas eran amigas pero tenían objetivos e intereses muy distintos ¿Acabarían enfrentándose?"
Cuando preguntaron a Carme sobre la posibilidad de que pudiera haber algún periodista que llegue al límite que llega el protagonista de tu novela, ella contestó que sí, que ya ha pasado. La novela habla de los monstruos que todos llevamos dentro. Todos tenemos un pequeño monstruo dentro y nunca sabemos qué puede sucedernos en la vida para que éste se despierte y nos convirtamos nosotros mismos en alguien deplorable. Esto es algo que le puede pasar a cualquiera.
Además, Carme confesó que ha escrito con mucha libertad sobre el periodismo, sobre las presiones, políticas y policiales, sobre cómo se maneja una redacción, por qué sale un tema u otro en un informativo, es decir, sobre el ecosistema de los periodistas de sucesos. Cree que ésto va a sorprender mucho al lector que no trabaja en el periodismo ya que cuenta cómo es su día a día, cómo es eso que no se ve detrás de las cámaras.
El jurado comentó que le sorprendió un capítulo que recuerda a la decisión de Sophie, y Carme Chaparro contó que sabe a qué capítulo se refieren y que es el único capítulo que no pudo releer hasta terminar la novela porque fue muy intenso de escribir, tanto que incluso llegó a recrearla en casa para intentar sentir lo que sentía la persona en ese capítulo.
A una pregunta del jurado sobre conocía a alguien de la policía que la hubiese podido ayudar en ciertos temas y puntos de la novela, Carme dijo que tenía amigos policías que le habían ayudado con los matices, desde la nomenclatura, a cómo se practica una autopsia, y este libro no sería lo mismo ni tendría la credibilidad que tiene si no hubiera tenido esa ayuda.
En cuanto a que la novela viene a contar un poco el lado oscuro del periodismo, la escritora señaló que lo que se cuenta en la novela es algo que todos viven en las redacciones, pero que se acostumbran a ciertos hechos y los dan como normales porque los viven a diario, pero que la gente no lo conoce y que le va a sorprender.
Cuando se le preguntó sobre si era la primera vez que escribía una novela o lo había hecho anteriormente aunque no se publicara, Carme mencionó que es la primera vez que escribía algo así, que solo había escrito las columnas de yo Dona y lo que escribe en su blog de yahoo pero nunca había escrito ficción. También dijo que para el primer manuscrito tardó tres meses y después fue cambiando sobre todo el estilo. Carme confiesa que es muy lectora y que todas las lecturas que ha ido acumulando en su memoria durante años la han ayudado a que la novela saliera tan del tirón.
En cuanto a los personajes comentó siempre están basados en personas y normalmente tienen cosas de muchas personas no solo de una, y también tienen cosas suyas. Además, incorpora anécdotas o historias de amigas que la encajan en un sitio o en otro.
Carme Riera alabó la manera en la que están medidos los tiempos y la manera de contar las cosas y cómo pensaba que tenía que ser una persona muy curtida quien había escrito la novela premiada, ya que todo está muy equilibrado y por eso sorprende tanto que sea su primera novela.
En cuanto al pseudónimo que utilizó, Paulina Murillo, el nombre es un homenaje a una tía suya que falleció hace tiempo y a la que se lo quería dedicar ya que nunca llegó a verla triunfar como periodista, y el Murillo por ser su segundo apellido.
Al preguntarle si había escrito la novela con el propósito de presentarla al concurso dijo que no, que la había escrito y dejado reposar y luego volvió a releerla. Entonces fue cuando contactó con una amiga suya que fue jefa de prensa y que ahora tiene una agencia que representa escritores, pero le dijo que no quería publicar la novela con su nombre ya que no quería que la gente la comprara porque era conocida, ni porque sale en televisión sino que quería que la novela se defendiera sola. Para esto, le dijeron, que lo mejor era presentarla a un concurso bajo un pseudónimo y esto ha sido el resultado. No quería que nadie editara esa novela solo por tener su nombre en la portada.
Después de esto solo decir que esperamos ansiosos el 21 de marzo que es la fecha de publicación de "No soy un monstruo" de la mano de Espasa y damos nuestra más sincera enhorabuena a Carme Chaparro porque estamos seguras de que este thriller nos va a enganchar desde el principio.