Revista Cultura y Ocio
Stephenie Meyer
Crepúsculo Cruzó como una bala, como un espectro, la oscura y densa masa de maleza del bosque sin hacer ruido, sin evidencia alguna de que sus pies rozaran el suelo. Su respiración no se alteró en ningún momento, jamás dio muestras de esforzarse, pero los arboles pasaban volando a mi lado a una velocidad vertiginosa, no golpeándonos por centímetros.