Frío

   Sí, seguimos con la encuesta, y otra vez este cuento es... solo un cuento.
   No es la primera vez que experimentamos esta sensación.

Frío

  
   Se estaba congelando, lo sabía.
   Lo había sabido desde el instante mismo en que la puerta se había cerrado. Y ella había quedad fuera de la cabaña, hundiéndose en la grisácea nieve.
   Ya no le quedaban fuerzas para golpear la madera desvencijada de la puerta. Ni siquiera para rasguñarla.
   Se acurrucó en el hueco que abría a su calor. Y esperó a que el frío pasase.
 
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