Revista Cocina

Gachas de avena con helado de plátano y arándanos

Por Eulàlia

Gachas de avena con helado de plátano y arándanos

Las gachas de avena son probablemente uno de mis desayunos favoritos. Si me seguís en Instagram probablemente ya hayáis visto que en invierno las como casi todos los días y que lo único que cambio son la fruta y los toppings (frutos secos, semillas, bayas gogi, coco...). Me parecen súper fáciles y rápidas de preparar y además están buenísimas, así que son un básico para mi.

Sinceramente en Ámsterdam aún no hace tanto calor como en España (en realidad me pregunto si llegará algún día haha) pero yo ya estoy en modo veraniego y he empezado a incluir los helados de plátano en mis desayunos y meriendas también. Desde que descubrí hace unos años que simplemente triturando plátano congelado se podía hacer un helado tan bueno, lo hago muchas veces y más en verano. Además se pueden hacer helados con la combinación que más os guste simplemente añadiendo cacao en polvo, frutos rojos o cualquier otra fruta que os apetezca.

Así que como las gachas y los helados son dos de mis desayunos básicos durante el año, el otro día pensé que sería una buena idea mezclarlos. Al principio era un poco excéptica por la mezcla de frío y calor pero la verdad es que el resultado me ha encantado. Es como disfrutar de lo mejor de ambos, y al mezclarse me encanta la textura también.

Hace unos meses publiqué en el blog 7 desayunos veganos para cada día de la semana, así que si no os termina de gustar esta combinación podéis echarle un ojo a ese post para más inspiración.

Espero que os guste 🙂

Ingredientes:

Instrucciones:

Como mínimo la noche anterior, pelamos los plátanos, los cortamos a trozos pequeños y los congelamos. Si queremos podemos congelar también los arándanos.

Por la mañana, trituramos los plátanos y algunos arándanos con la ayuda de una batidora y añadimos bebida vegetal al gusto hasta conseguir una textura cremosa.

Por otro lado, cocemos las gachas de avena en una olla pequeña con bebida vegetal hasta que quede también una textura cremosa.

En un bol, ponemos el helado y las gachas y decoramos con un poco más de arándanos.

¡Listo!


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