Gerona: una ruta medieval

Sin descartar la belleza de la histórica ciudad de Gerona, nuestro empeño se centra en proponer una ruta por algunos de los pueblos medievales de la provincia.

Beget

En la comarca del Ripollés visitamos este pequeño rincón de tan solo 30 habitantes. Imprescindible la Iglesia de Sant Cristòfol, Bien de Interés Cultural. Templo románico de ábside semicircular y bóveda de cañón. Adosada, una torre-campanario de cuatro pisos de estilo románico lombardo.

Tres barrios separados por el río y unidos por dos puentes medievales, conforman este pueblecito de casas de piedra balconadas y pequeñas calles empinadas.

Castellfollit de la Roca

Un pintoresco pueblo asentado sobre un acantilado de basalto, futo de la erosión de los ríos Toronell y Fluvià sobre las solidificadas lenguas de lava que dejaron las erupciones de los volcanes de Beguda. Su casco antiguo medieval, lo componen estrechas y sombrías calles que nos derivan al espectacular mirador de la plaza Josep Pla.

Curioso y singular el Museo de Vietnam, una colección particular única en Europa y repleta de insignias, uniformes, armas, fotos y municiones de aquella guerra.

Besalú

Conjunto histórico-artístico medieval del que forman parte la iglesia del monasterio de Sant Pere del siglo XII, con su original deambulatorio; la iglesia de Sant Vicenç del siglo XII, con una capilla gótica lateral dedicada a la Vera Cruz; la fachada de la antigua iglesia hospital de Sant Julià del siglo XII; la casa de Cornellà, románico del siglo XII y la sala gótica de la Cúria Real.

Una judería en la que, bajo los restos de una antigua sinagoga, se encuentran los baños sagrados de El Miqvé, una joya única en la península ibérica. Allí acudían las mujeres para purificarse después de la menstruación o antes de casarse y los hombres antes del Sabbat.

Santa Pau

En pleno Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, se alza esta villa medieval declarada Conjunto Histórico Artístico en 1971.

Un conjunto amurallado cuyos orígenes se remontan al siglo XIII. Estrechas calles y un marcado medievalismo destacando la Firal dels Bous, porticada e irregular plaza alrededor del castillo. Pedro el Grande descanso en el castillo camino de la guerra con los cruzados franceses.

Monells

Pueblo nacido a la sombra del castillo delos Vizcondes de Bas, destaca la Plaça Jaume I. De forma rectangular y porticada, la plaza albergó en la época medieval un importante mercado de cereales; lleva el nombre de Jaime I el Conquistador porque en 1234, promulgo que la medida de grano, la llamada "Pedra Mitgera" de Monells, fuera la referencia oficial en el obispado de Gerona.

Peratallada

Declarada Bien Cultural de Interés Nacional, la villa de Peratallada es un conjunto histórico-artístico de gran atractivo. Un elegante castillo, unas murallas con foso, unas calles estrechas y sinuosas dan a la villa un inconfundible carácter feudal.

Además de su castillo y murallas, destacan la porticada plaza de Les Voltes y la plaza del Castell así como la iglesia de San Esteban, un románico de dos naves con portal de arco de medio punto y campanario de cuatro ojos.

Pals

Nos recibe la muralla que abriga a la villa y nuestra mirada descubre, de inmediato, la majestuosa torre de las horas, emblema y orgullo de Pals.

La delicia de pasear por su empedradas callejuelas anima a llegar a la Plaça Major, contemplar las torres visigóticas, el castillo y llegar al Mirador Josep Pla. " Uno de los paisajes más bellos e inolvidables del país " en palabras del gran prosista.

Lo medieval nos acompaña con sus bóvedas, arcos de herradura, portaladas y ventanas románicas y góticas destacando la Iglesia de Sant Pere y la Torre de Ramonet.

Para colmo y disfrute general, a seis kilómetros del dentro de la villa, se encuentra la playa de Pals; un arenal de más de tres kilómetros dividido en dos: Playa Gran y Playa del Grau.

Palau Sator

Una mirada a los restos de la muralla nos deja, ya, testimonio del patrimonio medieval de Palau Sator. Por la portada sur llegaremos a la Torre de las Horas, vía de acceso a la zona antigua.

El antiguo castillo se remonta al siglo X sufriendo una ampliación y transformación durante el periodo gótico.

Es destacable la ermita de Sant Julià de Boada, uno de los monumentos prerrománicos más importantes y bien conservados de Catalunya. La Iglesia de San Pedro, con bóveda apuntada y ábside semicircular y construida entre los siglos XII-XIII y la Iglesia de Sant Feliu (en Boada), un gótico tardío del siglo XVI

Castelló d'Empúries

Muy cerca de la moderna marina residencial de Empuriabrava (la más importante de Europa) podemos pasear por el centro histórico de Castelló d'Empúries con sus calles y plazas con nombre de los gremios medievales.

Destaca la Basílica de Santa María de estilo gótico (siglos XII-XV) con restos de la primitiva iglesia románica y considerada la segunda catedral de Gerona. En el solar norte de la Basílica, en un yacimiento arqueológico se encontraron restos humanos datados en los finales del siglo VII.

El, excelentemente conservado, Lavadero con columnas porticadas de los siglos XVI y XVII. El barrio judío y el Portal de la Gallarda, la única entrada que se conserva de las ocho que tenía la cilla. El Puente Viejo, la Casa del Consejo y lonja de mar.

Perelada

Con independencia de su famoso castillo del siglo XIV. Documentos y pergaminos encontrados en el castillo documentan la elaboración del vino en la época medieval. En sus maravillosos jardines, se celebra el conocido Festival de Música Internacional de Peralada.

En su pintoresco casco antiguo, al que se entra por el Portal del Conde, cabe destacar el claustro Sant Domenech y la Iglesia de Sant Martí

Para terminar, si queda algo de tiempo y la ruta se hace en grupo, bien merece la pena subir hasta Cantallops desde Perelada (25 minutos) y descansar unos días en una de las casas rurales más encantadoras de Gerona: El Portaló de Cantallops