Hacer frente a la ansiedad y la depresión

La ansiedad y la depresión son los trastornos del estado de ánimo comunes que se producen en algún momento de nuestras vidas. La muerte de un ser querido, ruptura de una relación, la pérdida de un trabajo, o la ruina financiera puede hacer que uno se sienta deprimido. Al mismo tiempo, también se puede experimentar ansiedad por las relaciones, problemas financieros, o incluso problemas de salud.

La ansiedad y la depresión pueden ocurrir juntos y la gente tiene diferentes formas de experimentarlos.
Los síntomas de la depresión incluyen:

• Tristeza persistente y profunda
• Llorar todo el tiempo
• Fatiga, pérdida de energía
• Irritabilidad e inquietud
• Sentimientos de inutilidad
• Sentimientos de culpa
• Sentimientos de impotencia
• Dificultad para recordar, concentrarse o tomar decisiones
• Pérdida de apetito o comer en exceso
• Trastornos del sueño
• Pérdida de interés en el sexo
• Síntomas físicos como dolores de cabeza, dolores musculares y problemas digestivos
• Pensamientos de suicidio o autolesiones

Los síntomas de ansiedad incluyen:

• Preocupación y / o el miedo constante
• Incapacidad para mantener la calma
• Sentimientos de pánico
• Problemas para dormir
• Palpitaciones del corazón
• Manos sudorosas / pies
• Falta de aliento
• Tension muscular
• Mareo / vértigo

Por lo general, estos síntomas mejoran cuando un problema se resuelve o cuando se toman medidas para hacer frente a ellos. Hablar con alguien de confianza, mejorar los hábitos de estilo de vida, y relajarse puede ayudar a lidiar con estos sentimientos. Sin embargo, si estos síntomas persisten durante varias semanas y siente que están interfiriendo con el trabajo, las relaciones y la vida personal, puede que tenga que buscar ayuda de un profesional de la medicina.

El diagnóstico de la depresión y / o ansiedad se hace clínicamente por un médico después de la evaluación de sus síntomas y antecedentes clínicos. No hay pruebas de laboratorio específicas que sean necesarias, pero pueden solicitar excluir otras posibles condiciones médicas tales como la función de la glándula tiroides poco activa o enfermedades del corazón. Los medicamentos apropiados pueden ser recetados, incluyendo antidepresivos, ansiolíticos, sedantes y suplementos dietéticos para mejorar su salud.

¿Cómo hacer frente a la depresión y la ansiedad?

Uno de los efectos negativos de la sensación de ansiedad o depresión es que la gente se olvide de cuidar de su salud, que por lo general empeora sus síntomas. Algunos tienden a comer en exceso, y a permanecer en la cama, fumar cigarrillos, beber alcohol, un poco más de lo habitual. Estos pueden hacer que se sienta más cansado, con sobrepeso y poco saludable.

Algunas personas mejoran con sólo cambiar sus hábitos de estilo de vida. Evitar fumar, el consumo de alcohol o drogas. Mantener un peso saludable mediante una dieta saludable y hacer ejercicio regular a menudo ayuda a obtener más energía para realizar sus actividades diarias y mejorar su estado de ánimo. Los nutrientes que están relacionados con el alivio de la depresión incluyen las vitaminas B, C, D y E, selenio, ácidos omega-3 grasos y diversos antioxidantes de las frutas y verduras.

El ejercicio ayuda a reducir la ansiedad y la depresión, al permitir que el cuerpo libere endorfinas, nuestros productos químicos para sentirnos bien desde el cerebro. También ayuda a reducir la inflamación y equilibrar el sistema inmunológico. El ejercicio también ayuda a sentirse bien consigo mismo, ganar confianza, y distraer la atención de los pensamientos y comportamientos negativos. Usted no tiene que obtener una membresía de gimnasio para hacer esto, hacer tareas simples como la jardinería o llevar a su perro a dar un paseo con regularidad puede ser un buen comienzo.

Las técnicas de relajación como el yoga, la meditación, dar un paseo en el parque, escuchar música relajante, y actividades similares pueden ayudar a reducir los pensamientos negativos. Los expertos también aconsejan a los pacientes conseguir el apoyo de amigos y familiares, y salir y socializar en lugar de quedarse en casa solo o trabajarndo más horas.

Si sus síntomas no mejoran después de un par de semanas de intentar hacer frente a ellos, programe una cita con su médico. Es posible que tenga que tomar algunos medicamentos además de estas medidas para mejorar sus síntomas.