Seguro que el descubrimiento del fuego se debió a un hallazgo casual, pero el poder que ofrecía como medio para sobrevivir en las épocas frías, ahuyentar a las alimañas, cocinar alimentos de otra manera incomestibles o como ayuda para la fabricación de herramientas, probablemente provocó que más de uno agudizara el ingenio para encontrar la manera de conseguirlo justo en el sitio y momento en que fuera necesario. En los orígenes de la humanidad se trataba de un elemento de supervivencia indispensable. Podéis preguntar a Bear Grylls.
Lo de la percusión de rocas para producir chispas y lo de la fricción de maderas duras y blandas, son técnicas que por el tiempo transcurrido desde que fueron ideadas, están bastantes desarrolladas. Baste echar un vistazo a estas siete maneras de hacer fuego sin cerillas [traducido] (ni encendedores o similares, por supuesto) dónde podremos ver, entre otros, este cómodo diseño de la derecha que incluye un volante de inercia.
Pero procrastinando un poco he encontrado algunos sistemas más.
Con una pila de 9 voltios y lana de acero, se puede hacer una fogata en un santiamén. El problema es tener a mano estos dos elementos, pero nunca se sabe. Además, el prendido es rapidísimo. Me ha gustado.
También he encontrado este otro vídeo en el que nos explican cómo hacer fuego con una patata. Pero salvo que algún químico me corrija, creo que la pasta de dientes y la sal tienen pocas posibilidades de reaccionar. De otra manera, sería divertido probar a lavarnos los dientes justo después de darnos un buen festín de hueva o mojama, así que creo que esta siguiente es la única manera real de hacer fuego sólo con un tubérculo.
El sol es fuente de energía y por eso hay un buen puñado de sistemas que lo que hacen es concentrar los rayos del sol para producir calor. Así tenemos las conocidas lupas y otras herramientas más toscas pero igual de efectivas, como botellas de agua o condones.
Más tecnológico a pesar del material usado, es esta otra idea para hacer fuego con una lata de Coca-Cola y chocolate. La lata es para usar su fondo como parábola y el chocolate para comer mientras esperas resultados. Bueno, no... es para pulir la superficie de aluminio, pero si sobra no vamos a desperdiciarlo ¿no?
En fin, hay un montón de maneras de conseguir hacer fuego e incluso hay un tipo en YouTube que está recopilando todas las que se le ocurren. 101 maneras de hacer fuego es el título común de la colección, pero de momento va sólo por la 16. Será cuestión de esperar, aunque ya os advierto que son vídeos demasiado freak.
Y para terminar un pequeño desafío individual. Antes de ver el vídeo ¿se te ocurre cómo se podría hacer fuego con hielo? El sistema, como con la magia, una vez revelado es muy evidente y de hecho es similar a algunos ya comentados anteriormente. Fácil, fácil, fácil, pero bastante curioso e ingenioso...
S*Ingenio - Blog
Lo de la percusión de rocas para producir chispas y lo de la fricción de maderas duras y blandas, son técnicas que por el tiempo transcurrido desde que fueron ideadas, están bastantes desarrolladas. Baste echar un vistazo a estas siete maneras de hacer fuego sin cerillas [traducido] (ni encendedores o similares, por supuesto) dónde podremos ver, entre otros, este cómodo diseño de la derecha que incluye un volante de inercia.
Pero procrastinando un poco he encontrado algunos sistemas más.
Con una pila de 9 voltios y lana de acero, se puede hacer una fogata en un santiamén. El problema es tener a mano estos dos elementos, pero nunca se sabe. Además, el prendido es rapidísimo. Me ha gustado.
También he encontrado este otro vídeo en el que nos explican cómo hacer fuego con una patata. Pero salvo que algún químico me corrija, creo que la pasta de dientes y la sal tienen pocas posibilidades de reaccionar. De otra manera, sería divertido probar a lavarnos los dientes justo después de darnos un buen festín de hueva o mojama, así que creo que esta siguiente es la única manera real de hacer fuego sólo con un tubérculo.
El sol es fuente de energía y por eso hay un buen puñado de sistemas que lo que hacen es concentrar los rayos del sol para producir calor. Así tenemos las conocidas lupas y otras herramientas más toscas pero igual de efectivas, como botellas de agua o condones.
En fin, hay un montón de maneras de conseguir hacer fuego e incluso hay un tipo en YouTube que está recopilando todas las que se le ocurren. 101 maneras de hacer fuego es el título común de la colección, pero de momento va sólo por la 16. Será cuestión de esperar, aunque ya os advierto que son vídeos demasiado freak.
Y para terminar un pequeño desafío individual. Antes de ver el vídeo ¿se te ocurre cómo se podría hacer fuego con hielo? El sistema, como con la magia, una vez revelado es muy evidente y de hecho es similar a algunos ya comentados anteriormente. Fácil, fácil, fácil, pero bastante curioso e ingenioso...
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